Si este jueves 28 mayo agroinformacion.com se hacía eco del aumento de la cosecha de cereales que vaticinaba Cooperativas Agro-Alimentarias, un día después la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) quiere recalcar que pese a un año donde la cosecha iba a ser medianamente aceptable, una vez más, el descenso brutal de los precios en origen y el desmesurado aumento de los precios del gasóleo y otros imputs, imprescindibles para la consecución de la cosecha, «nos lleva a trasformar la cosecha en una campaña agrícola nefasta», a la que hay que sumar unas masivas importaciones de cereal.
Desde la UCCL quieren poner de manifiesto su más absoluto rechazo «a las prácticas abusivas empleadas por parte de las multinacionales, que ante unas mínimas expectativas de una cosecha aceptable, inmediatamente estas se encargan de llevarse las ganancias de los esforzados agricultores.»
Esta organización agraria mantiene que están injustificadas las masivas importaciones que se están haciendo de cereales en estos momentos, «sin ni siquiera saber cuáles van a ser los resultados reales de la cosecha en nuestra comunidad, y haciendo prever una sobreoferta que conlleva al hundimiento de los precios en origen».
«UNA ESPECULACIÓN PURA Y DURA»
UCCL exige a las administraciones competentes que se haga un exhaustivo control de las importaciones para que realmente cumpla las normas de trazabilidad y las exigencias que los agricultores europeos están obligados a cumplir, ya que en muchos casos estas materias primas de importación no cumplen con todos los requisitos que si se exigen a los agricultores europeos.
Para la UCCL esta situación «es una especulación pura y dura por parte de las multinacionales que en ningún caso beneficia ni agricultores ni a ganaderos ni incluso a los consumidores, y que como siempre acaba en la cuenta de resultados de estas empresas totalmente deslocalizadas»
Desde UCCL quieren resaltar que una cosecha bastante aceptable comparándola con la anterior que fue de absoluto desastre, se va a ver empañada una vez más por esta importante caída de precios y además agravada por el incremento de los factores de producción necesarios para la consecución de las actividades como son los gasóleos o abonos.