La caída de los precios de los cereales en España se mantiene constante en el último trienio -sobre todo en trigo y cebada-, como reflejo del mercado internacional y de la abundancia mundial de existencias de grano, que previsiblemente va a continuar.
Entre enero de 2014 y 2017, las cotizaciones del trigo blando bajaron un 16% en los mercados mayoristas, hasta 171,39 euros por tonelada; las de trigo duro, un 7,65% (215,33 euros/tonelada) y las de cebada un 12,12% (155,03 euros/tonelada), según ha informado la Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (Accoe).
Desde Acooe se asegura que todo apunta a que la tendencia bajista va a continua
Sin embargo, las últimas cotizaciones del maíz son las mismas que las registradas en enero de 2014, si bien disminuyeron un 3,3% respecto a julio de ese año.
El secretario general de Accoe, José Manuel Álvarez, ha declarado a Efeagro que el año empieza con pocos movimientos en el comercio de cereales «en todo el mundo» y que, según las previsiones, todo apunta a que su tendencia bajista va a continuar y que se mantendrá esta caída de los precios.
La razón es la oferta abundante de grano, con la sucesión de años de buenas cosechas, calificadas como «récords», lo que incluso en 2016 se trasladó a España, país tradicionalmente deficitario, pero que el año pasado obtuvo una producción copiosa, según Álvarez.
Ha recordado que en 2010 se hablaba de una situación de precios al alza hasta 2020, pero la situación se invirtió y parece que, por el contrario, ha habido un «crecimiento verde», que algunos expertos hasta atribuyen al cambio climático.
En el caso del maíz, las cotizaciones han mostrado más vaivenes en el último trienio, pero en el trigo se han reducido más, lo que también se ha visto influido por una menor calidad de las producciones.
La cosecha de trigo blando en Francia, primer abastecedor de España, podría alcanzar los 38 ó 40 millones de toneladas
Los expertos auguran que el ciclo de abundancia va a continuar y, de hecho, el último informe de la Organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha elevado sus estimaciones de producción mundial de trigo, en la campaña 2016-2017, hasta 758 millones de toneladas (9 millones de toneladas más que en el cálculo de diciembre).
Con estos aforos, motivados por el incremento de cosechas de Australia y Rusia, la FAO augura que habrá «récord de producción» de trigo por cuarto año consecutivo, lo que impulsará otra caída de los precios.
Además, las cifras de la FAO superan a las de otros dos organismos de referencia, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, siglas en inglés) y el Consejo Internacional de Cereales (IGC), según un análisis difundido este lunes 6 por el banco alemán Commerzbank.
El banco alemán recoge también las estimaciones de la AGPB, la asociación que agrupa a los cultivadores franceses de cereales, según la cual su cosecha de trigo blando podría alcanzar los 38 ó 40 millones de toneladas en 2017-2018, lo que la situaría cerca del «récord histórico» registrado en 2015-2016.
Francia es el primer abastecedor de cereales de España, para quien también son importantes los envíos de Rusia y de Ucrania.