EFE.- La medida, que afectaría en particular al maíz, la colza, el girasol y el algodón, fue anunciada ayer en una reunión de expertos de los Veintisiete, con motivo del primer debate europeo sobre el tema, según explicó en rueda de prensa el portavoz comunitario de Sanidad y Consumo, Frédéric Vincent.
El origen de la decisión es un reciente informe de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, según las siglas en inglés) que relaciona el uso de los insecticidas neocotinoides, sustancias derivadas de la nicotina, con la alta mortalidad que sufren las colonias de abejas.
La Asociación Española para la Protección de las Plantas (Aepla) ha pedido a Bruselas que no se precipite en prohibir estos plaguicidas, ya que es una medida que "no es proporcionada ni está basada en todos los datos científicos disponibles".
La Asociación Europea de Apicultores Profesionales (EPBA, en sus siglas en inglés), quiere que se prohíba totalmente la utilización de estos plaguicidas neurotóxicos en toda actividad agrícola, incluida la pulverización en frutales o los cultivos forestales y de cereales.