Se fumiga en septiembre y octubre por ser éste el período de mayor presencia de los nidos de oruga a modo de grandes bolsones de seda en las ramas de los pinos.
La procesionaria del pino es una de las plagas con mayor seguimiento en Bizkaia desde hace décadas, aunque afecta mínimamente (menos de un 10 % en 2012) a la masa forestal, según ha expuesto la titular foral de Agricultura.
Tras constatar que el tratamiento efectuado el pasado año ha sido "eficaz", porque la plaga ha desaparecido allí donde se aplicó, la Diputación ha fijado que este año hará fumigaciones en unas 6.800 hectáreas de pino.
La diputada de Agricultura ha explicado que las fumigaciones aéreas se llevan a cabo actualmente desde helicóptero, y no desde avioneta como se hacía antes, dado que al hacerlas a menor altura se gana en eficacia y se evita una mayor deriva, por efecto del viento, del producto usado en la fumigación.
Ha detallado que en las fumigaciones se combinan los productos empleados, principalmente el pesticida difluorbenzuro y, en menor medida, la bacteria bacillus thuringiensis, utilizada como una alternativa biológica al pesticida.
El apoderado de Bildu Asier Vega ha admitido ante la diputada que en los últimos años se han "mejorado considerablemente" las técnicas de fumigación. No obstante, ha preguntado por las medidas que toma el Ejecutivo foral cuando se hacen las fumigaciones.
Irene Pardo ha explicado que se avisa a ayuntamientos y agricultores cuando se efectúan estas tareas y que hay establecida una franja de seguridad para llevarlas a cabo a menos de 100 metros de los núcleos urbanos y de otras zonas.
Ha resaltado que la Diputación vizcaína hace un seguimiento "permanente" de la plaga de la procesionaria del pino para ir mejorando en las técnicas y productos para su eliminación.