El consorcio BASOTEK, creado para dar respuesta a los retos actuales y futuros de la cadena de valor forestal-madera en Euskadi, ha presentado los proyectos de valor añadido en los que trabaja con el fin de impulsar la competitividad del sector.
BASOTEK, consorcio multidisciplinar de I+D+i, está integrado por centros tecnológicos que investigan en torno al sector forestal y la construcción y por entidades que aglutinan a los principales agentes de la cadena de valor forestal-madera de Euskadi (BaskEgur, HAZI, NEIKER, TECNALIA, Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea (UPV/EHU) y Vicomtech). También apoyan este consorcio la Dirección de Vivienda del Gobierno Vasco y las Diputaciones Forales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Además, colaboran en BASOTEK las entidades de carácter europeo de referencia en materia forestal European Forest Institute (EFI) y la Unión de Selvicultores del Sur de Europa (USSE).
Liderado desde la Viceconsejería de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria el Gobierno Vasco, BASOTEK está alineado con los retos del Gobierno Vasco para impulsar la innovación en el sector forestal, y se enmarca dentro de su estrategia de promover la bioeconomía forestal como un nuevo paradigma o una nueva oportunidad de desarrollo económico basado en la utilización de los recursos forestales para generar nuevos productos o herramientas de valor añadido. En Euskadi la superficie arbolada alcanza un 54% de la superficie total, uno de los porcentajes más elevados de la UE, y el sector forestal-madera representa el 1,5% del PIB y emplea alrededor de 18.000 personas.
Bittor Oroz, viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno Vasco, ha explicado que BASOTEK «trata de unir a todos los agentes de la cadena forestal-madera con el fin de trabajar conjuntamente en torno a las necesidades del sector».
«Entre los objetivos de BASOTEK destacan el lanzamiento de proyectos que transformen el sector en términos de competitividad y sostenibilidad, la participación en proyectos de excelencia o de alto contenido innovador, la vigilancia tecnológica, la participación del sector en las convocatorias de proyectos financiados desde Europa, la creación de nuevas actividades empresariales o la promoción de alianzas clave con otros centros referentes internacionales», ha señalado.
Actualmente, BASOTEK centra su actividad en cuatro líneas de trabajo: uso de la madera en la construcción, nuevos materiales a partir de la madera o de sus subproductos, aseguramiento del recurso forestal-madera y mejora de la competitividad del sector.
Construcción
Respecto al uso de la madera en la construcción, se promueve el desarrollo de instrumentos, herramientas y proyectos que favorezcan su uso en vivienda pública y privada. BASOTEK trabaja en dos líneas complementarias: «Alojamientos dotacionales en madera» y en el desarrollo de una «Herramienta para la Toma de Decisiones en el Proyecto y Ejecución de obra de nueva planta en madera». El objetivo de la primera es optimizar los costes de construcción de vivienda de alquiler público mediante su sistematización, prefabricación y repetición. Es un trabajo de investigación y experimentación que busca mejorar los procesos constructivos sostenibles. En 2019 se trabajará en la definición de un proyecto constructivo ‘tipo’ de alojamiento dotacional, construido en madera y replicable. En 2020 se construirá y validará un primer prototipo.
La segunda línea se asocia con una metodología. La construcción en madera requiere de una nueva praxis en los procesos proyectual y de ejecución, muy diferente al empleado en la edificación convencional. Con el objetivo de impulsar la edificación íntegramente en madera, la propuesta de esta segunda línea incluye tres ejes: una efectiva tecnificación de los procesos, una verificación en un caso real de las herramientas informáticas previamente desarrolladas y una estimación comparada, frente a la construcción convencional, de los costes reales de la construcción en madera. El proyecto se plantea en dos fases: en la primera (2019) se desarrollarán aplicaciones informáticas de altas prestaciones y en la segunda (2020) se verificará la aplicabilidad y ergonomía del planteamiento de la primera fase.
Mejora de la competitividad
En esta línea de trabajo también se están desarrollando dos proyectos, BIOTOP y BASOA 4.0. El primero, BIOTOP, plantea desarrollar un sistema edificatorio competitivo con etiqueta -BIO y altas prestaciones, basado en el uso masivo de madera local que permita una producción industrializada elevada. El sistema edificatorio estará compuesto por componentes que alcancen un elevado grado de ecoeficiencia (con reducción de impacto, renovables, reciclados, reciclables y etiquetable como -BIO).
Utilizará paneles estructurados de madera con material aislante biobasado y ofrecerá la posibilidad de revestimiento con componentes de madera tratada sin materiales tóxicos. La fabricación será industrializada avanzada mediante un proceso integrado ajustado a las necesidades de la economía circular.
El segundo, BASOA 4.0, busca la digitalización de la cadena del valor forestal-madera. La digitalización del sector es uno de sus principales retos estratégicos y los dos grandes elementos de transformación tienen que ser la digitalización de los diferentes subsectores y el desarrollo de la bioeconomía. Este proyecto no busca únicamente de la adopción de tecnologías digitales, sino un cambio de paradigma desde un sistema altamente manual y analógico con prescripciones de gestión basadas en la experiencia a un sistema con una captura de datos y planificación digital, con nuevos sistemas de toma de decisiones.
Se entiende que uno de los grandes retos del sector es la necesidad de incrementar notablemente su competitividad. Buena parte de dicha mejora se logrará con el uso de las nuevas tecnologías para modernizar el sector en su conjunto.
Nuevos materiales
En la línea de trabajo relativa a nuevos materiales a partir de la madera o de sus subproductos destaca la utilización de serrín como aislante natural o la obtención de pinturas menos contaminantes y más sostenibles a partir de desechos de madera. Se trata de dar respuesta a la llamada química verde. Se buscan nuevos materiales basados en madera o en subproductos que hasta ahora se desperdiciaban.
El proyecto para la creación de aislantes naturales pretende utilizar serrín para obtener un poliol, elemento base para fabricación, entre otros productos, de aislante para construcción. Dicho poliol tendrá propiedades similares a los aislantes producidos por la industria petroquímica. A través de este proyecto se pretende demostrar la viabilidad técnica y económica de la producción de espumas aislantes más naturales para construcción utilizando subproducto del aserrado de la madera.
La iniciativa para crear pinturas menos contaminantes y con menor toxicidad fomenta la revalorización de residuos forestales que permitan, desde una aproximación de bioeconomía circular, aprovechar toda la cadena de valor de la madera. Los productos necesarios para producir estas pinturas se obtienen de residuos de poda, serrín, corteza, etc., que actualmente son subproductos de bajo valor y se utilizan principalmente para generar energía mediante su combustión. Estos nuevos productos sustituirían a los derivados del petróleo que hoy se utilizan para fabricar pinturas, con el consiguiente impacto ambiental.
Aseguramiento del recurso forestal-madera
BASOTEK viene trabajando también en el aseguramiento del recurso forestal-madera mediante la mejora en la calidad de las plantas mediante la nutrición con compost y biochar.
En el éxito de una plantación forestal tiene un enorme peso la fase de producción de plantas en vivero. El manejo llevado a cabo en el vivero en esta etapa inicial condiciona la calidad de la planta y, una vez trasplantada a campo, la calidad del futuro árbol. El habitual uso de fertilizantes nitrogenados en los viveros puede provocar que las plantas sean más susceptibles a plagas y enfermedades, por ello es fundamental dar con productos alternativos. Con este proyecto se buscan materias primas que bajo el concepto de economía circular (compost, biochar, etc.), sirvan como sustrato alternativo para el crecimiento de las plantas en vivero.
Se trata de trabajar en la sanidad de las plantas, en su mejora genética, en el incremento de la calidad de la madera y en la búsqueda de nuevas especies.
Más información sobre BASOTEK en www.euskadi.eus/basotek