Ávila es la provincia donde más animales mueren por los ataques de lobos. Pero esta semana se ha convertido casi en un merendero animal, con tres ataques de lobos y uno de buitres que se ha saldo con la muerte de cuatro animales.

Así, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) ha denunciado los tres ataques de lobos que ha sufrido durante la última semana una explotación del municipio abulense de Las Navas del Marqués, que ha perdido tres animales.

Esta organización agraria ha enmarcado estos ataques dentro de los cinco ataques sufridos por distintos ganaderos abulenses, tres de los cuales han tenido como escenario este municipio abulense próximo a la Comunidad de Madrid.

Ante esta situación, UCCL Ávila ha recordado que estos ataques se han producido «apenas una semana después» de que el BOE publicara la orden que otorga la máxima protección al lobo al sur del Duero, en cumplimiento a la Directiva de Hábitats de la Unión Europea.

Los tres ataques sufridos en los últimos días han hecho que esta explotación navera haya perdido un ternero de una semana, otro de un mes y otro de tres meses y medio.

Se da la circunstancia que este mismo ganadero ya sufrió durante el pasado mes de abril otro ataque que provocó la muerte de un ternero de apenas unos días.

Estos ataques penen de relieve, según esta organización agraria, que Las Navas del Marqués se ha convertido no en un merendero animal pero sí en el «escenario ideal para los festines de estos animales a los que consideran amenazados, cuando en realidad los amenazados los ganaderos que están viendo que de seguir así la ganadera al final va a acabar desapareciendo».

denuncian un ataque de buitres a un ternero que no era recién nacido

Por su parte, la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) ha denunciado la muerte de un ternero de 30 días en el término municipal abulense de Rasueros, al norte de la provincia, tras sufrir el ataque de, al menos, sesenta buitres.

Según ha informado este miércoles en una nota de prensa la organización agraria, se trata de un caso «extraordinario y novedoso», teniendo en cuenta que el ataque no se ha producido al nacer éste, como suele ser habitual, sino un mes después de su nacimiento.

Asimismo, subraya el hecho de que los buitres hayan actuado en una zona donde «nunca antes se había producido una incidencia de este tipo», lo que a su juicio demuestra «la expansión de esta especie protegida por la Administración».

Para UPA, se trata de «un incidente más, que demuestra a todos aquellos que lo ponen en tela de juicio, que estas aves atacan a presas vivas».

Ante esta situación, la organización agraria ha reclamado un «control» de esta especie, ya que su número «se está multiplicando de forma extraordinaria en la provincia», sin que a su juicio se esté haciendo «absolutamente nada por poner control a la proliferación de ejemplares».

Por ello, UPA reclama «actuaciones concretas», a la vez que ha solicitado la puesta en marcha de «una indemnización directa» por parte de la Administración autonómica para los ganaderos afectados por este tipo de ataques.