Tras las palabras de bienvenida, el presidente de Caja Rural del Sur, José Luis García Palacios, ha felicitado al Gobierno por el resultado de las negociaciones de la PAC, y especialmente al ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete y al consejero de Agricultura, Luis Planas, por haber aparcado sus diferencias políticas y haber trabajado juntos para conseguir un mejor resultado en las negociaciones”.
A continuación, el presidente de UNICEF, Ricardo García, agradeció al ICAM el promover estos encuentros donde la agricultura es foro de reflexión, ya que la alimentación es uno de los pilares básicos de la sociedad y, como afirmó, “aunque hemos avanzado para intentar paliar el hambre en todas partes del mundo, la grave crisis en la que nos encontramos sigue afectando a esa pobreza que afecta a muchas sociedades, que es absoluta y provoca, incluso la muerte de familias enteras, algo que es inadmisible en pleno siglo XXI”.
Por su parte, el presidente de ASAJA-Sevilla, Ricardo Serra, recordó que en el año 2030 seremos 9.000 millones de habitantes en el mundo, según la FAO, y se incrementará la demanda de alimentos un 70%, "por lo que no se puede seguir desmantelando el sistema agrario". Para ello, recordó, “habrá que apostar por la biotecnología o nos terminará pasando la ola por encima".
Se ha hecho bien, pero falta el ‘sudoku’ autonómico
En cuanto al resultado de las negociaciones de la PAC, el presidente de ASAJA-Sevilla afirmó que "lo que se ha hecho, se ha hecho bastante bien y entre todos, los políticos y también los técnicos de ASAJA, hemos logrado darle la vuelta a una propuesta inicial disparatada y hemos logrado un mecanismo que evitará las transferencias de renta; ahora queda el sudoku de encajar todas las autonomías, por lo que habrá que seguir trabajando”.
Una vez inaugurada la jornada, el director de ICAM, Daniel Pérez, dio las gracias a UNICEF, que lleva cinco años colaborando con estas jornadas, y a todas las empresas colaboradoras “que apuestan por la agricultura y con las que caminamos juntos”, y dio paso a la ponencia magistral “la reforma de la PAC, un acuerdo para un horizonte 2020”, del presidente del Fondo Español de Garantía Agraria del MAGRAMA, Fernando Miranda, uno de los negociadores en primera línea de este acuerdo.
Miranda ha asegurado que el nuevo acuerdo ha permitido corregir una propuesta inicial muy lesiva e introducir elementos de flexibilidad para adaptarla a España. En este sentido, recordó, se ha logrado alejar el fantasma de la tasa plana: “Había que pasar de unas ayudas en base a referencias históricas a un modelo regional sin llevarnos por delante sectores productivos como hubiera sucedido con la tasa plana, al no tener en cuenta nuestra diversidad productiva; ahora esa transición se hará con una cierta estabilidad y para ello contamos con un marco financiero para el sector agrario español de 47.000 millones de euros para los próximos siete años, procedentes de fondos comunitarios, que ascenderían a un total de 50.000 si sumamos el fondo nacional”.
Fernando Miranda apuntó algunas de los logros que España ha conseguido para el nuevo acuerdo, como haber eliminado de la distribución de ayudas a superficies que no se dedicaban a la actividad agrícola y ganadera para evitar trasvases de fondos o que el “greening” sea proporcional al nivel de ayudas que se cobre y lo reciban “per se” los cultivos permanentes, como el olivar.
Un sistema de regionalización compatible con el modelo español
El presidente del FEGA aseguró que ahora es el momento de la negociación interna, para lo que se ha logrado rebajar al 60% el porcentaje para la convergencia. Asimismo, Miranda ha informado de que se ha incluido una clausula de salvaguarda para que nadie pierda más del 30% de sus ayudas actuales.
En cuanto a cómo se aplicará la reforma en España, Fernando Miranda informó que se hará mediante un sistema de regionalización compatible con el modelo español, que tenga en cuenta sus particularidades.
Así, explicó, se delimitarán entre 20 y 40 comarcas agrarias, como delimitación geográfica de partida, y dentro de ellas se distinguirán las tierras de regadío, secano, pastos y los cultivos permanentes. “Actualmente existen 1.150 regiones con importes unitarios distintos, por lo que habrá que trabajar junto con las organizaciones agrarias para llegar a agrupar por estratos a esas regiones iniciales y que en 2019 se configuren entre 20 y 40 comarcas con sus cuatro importes unitarios distintos”.
Finalmente Miranda lanzó una mirada de optimismo hacia los próximos años y recordó que se han logrado minimizar los trasvases de importes entre beneficiarios y hemos evitado la catástrofe que se nos venía encima con la propuesta de la Comisión; ahora habrá que trabajar para mantener nuestro presupuesto en 2020 y para ello cambiar algunas cosas e intentar canalizar las ayudas para que solo lleguen a los que ejerzan una actividad agraria real”.
A continuación, ha intervenido Miguel Suárez-Cervieri, responsable de negocios de BASF Agro en España quien destacó la enorme diversidad de la agricultura española y su enorme potencial productivo, así como el esfuerzo que desde su empresa se viene haciendo para reivindicar el importante papel que desempeña el agricultor en la sociedad como productor de alimentos. Suárez-Cervieri recordó el lema de su empresa “Juntos tenemos campo por delante” para poner de manifiesto la labor que desde BASF Agro se viene realizando con ASAJA-Sevilla y con todos cuantos colaboran a dar a conocer y a dignificar la misión tan importante que tienen hoy en día los agricultores en nuestra sociedad.
La última conferencia del encuentro ha sido ofrecida por la directora de la Fundación ANTAMA, Soledad de Juan Arechederra, quien ha disertado sobre la evolución de la biotecnología agraria en el mundo, destacando el fuerte incremento experimentado por esta tecnología al servicio de los agricultores y de la sociedad en los últimos años, en los que la superficie mundial dedicada a los cultivos biotecnológicos supera los 170 millones de hectáreas con un saldo medioambiental muy favorable por la reducción en el uso de fitosanitarios, la reducción de las emisiones de CO2 e incluso la reducción general de superficie cultivada derivada de los mayores rendimientos de producción por hectárea. Mejoras que en los próximos años y con los últimos avances en la investigación y la innovación permitirán incluso reducir el consumo de auga.
Homenaje a Jaime Loring Miró
Por último, en la jornada se ha ofrecido un merecido homenaje a Jaime Loring Miró, miembro de ICAM, fundador de ETEA, el gérmen original de la Universidad Loyola, y uno de los impulsores de la Política Agraria Mundial (PAM). El consjero de Agricultura, Luis Planas, ha sido quién le ha hecho entrega de esta distinción por su importante contribución a la agricultura andaluza a lo largo de estos años, distinción que ya han recibido Alberto Ballarín Marcial, en el 2009, Ramón Tamames Gómez, en 2010, Jaime Lamo de Espinosa en 2011, y Tomás García Azcárate en 2012.
Luis Planas ha felicitado a Jaime Loring, sacerdote jesuita, teólogo, ingeniero Agrónomo, economista y Doctor en Filosofía y Letras, que ha recibido la Distinción de Honor del ICAM de quien ha destacado su labor de una vida volcada en la docencia, especialmente en la economía agraria, y, sobre todo, en la lucha contra las desigualdades.
Previo al acto de entrega, Luis Planas ha puesto de manifiesto el importante papel que desempeña la agricultura, “el verdadero motor económico, que no sólo genera empleo y riqueza en nuestros pueblos, sino que además sustenta una de las principales industrias manufactureras de nuestro país”.
En cuanto a la importancia de la reforma de la Política Agrícola Común (PAC), el consejero ha recordado que “Andalucía es la principal beneficiaria de la PAC en España, con unos 2.000 millones al año que benefician a cerca de 280.000 personas”. Por todo ello, ha puntualizado, “cualquier cambio en esta política afecta de lleno a los agricultores europeos, especialmente en el caso de Andalucía, donde contamos con una enorme diversidad de explotaciones agrarias”.
Sobre el reciente acuerdo político alcanzado entre las tres instituciones comunitarias acerca de la reforma de la PAC, el consejero ha insistido en que “ésta no es la reforma que queremos desde Andalucía porque no se ajusta a las características de nuestra estructura productiva agrícola y ganadera”.
Andalucia reconoce avances pero "no estamos satisfechos"
No obstante, ha concretado, destacan algunos avances en el acuerdo alcanzado en Bruselas con respecto a las propuestas de la Comisión en 2011, tales como la posibilidad de limitar la superficie elegible con derecho a ayudas, la posibilidad de limitar la convergencia interna o dentro de una misma región, la posibilidad de limitar las pérdidas ocasionadas por esta convergencia entre agricultores con un techo máximo de pérdida del 30%, así como la posibilidad de evitar la convergencia interna hacia una tasa plana total o la aplicación de un régimen para los pequeños agricultores que facilita y simplifica los trámites para más de 117.000 agricultores en Andalucía que reciben menos de 1.250 euros.
Igualmente, ha destacado las facilidades para que la mayoría de los cultivos se puedan acoger al llamado ‘pago verde’ o ‘grenning’, sobre todo en el caso de los cultivos permanentes como el olivar y los cítricos.
Sin embargo, ha explicado, “hay aspectos con los que no estamos satisfechos como la pérdida de presupuesto en términos reales para España, unos 800 millones de euros, o la falta de ambición en los mecanismos de gestión de mercados, entre otros aspectos”. No obstante, ha concretado, “aún quedan matices que se tienen que definir en Bruselas”.
Por otro lado, y con independencia de las negociaciones de Bruselas, el consejero ha insistido en que, “hasta que no se cierre el modelo de aplicación en España no podremos hacer una valoración real del impacto de esta reforma en Andalucía”. Asimismo, ha anunciado que mañana se retoman los contactos técnicos con ASAJA y con el resto de organizaciones agrarias para estudiar a fondo el documento de reforma de cara a la conferencia sectorial específica sobre la PAC que se celebrará los próximos días 24 y 25 de julio en Madrid y en la que participarán todas las CC.A. y el Ministerio de Agricultura.