EFE.- "El borrador contempla reducciones que no pueden tolerarse, pues de llevarse a la práctica tendrían un efecto desastroso" para la agricultura alicantina, ha afirmado hoy el presidente provincial de Asaja, Eladio Aniorte, a través de un comunicado.
Según ha recordado, el agua de la cuenca del Segura supone sólo un 11% de la que alberga el Tajo, por lo que un "recorte" hídrico sobre este porcentaje tendrá graves consecuencias.
"Supondría el abandono de la superficie cultivada y un mayor aumento del desempleo, por eso el trasvase debe mantenerse como hasta ahora", ha dicho Aniorte, quien ha asegurado que "muchos productores están abandonando" la actividad "por el actual precio del agua".
"Si se reducen los aportes, el coste se incrementará", ha advertido el presidente de esta asociación agraria, quien considera que el recorte del caudal propuesto por Castilla-La Mancha esconde "el poder sacar una mayor rentabilidad del negocio del agua".
Según Aniorte, la agricultura alicantina puede generar empleo y riqueza siempre que el precio del agua se sitúe por debajo de los 0,20 euros/m3.
"Resulta incomprensible que el Gobierno de Castilla-La Mancha siga tratando de hacer cumplir sus pretensiones de reducir una obra que ha generado riqueza y que mantiene muchos puestos de trabajo", ha agregado.
Para Aniorte, la iniciativa de la comunidad castellanomanchega "no tiene apoyo, ni legitimidad".
Según datos del Ministerio de Medio Ambiente facilitados por Asaja, los embalses del Tajo almacenan actualmente 5.754 hectómetros cúbico, alrededor de 70 hm3 más que en la misma semana de 2012.
"No están negociando el trasvase, si no la muerte de la agricultura", ha aseverado el presidente de Asaja-Alicante.