EFE.- Así lo ha asegurado a Efe el presidente de la organización agraria en Huesca, Fernando Luna, para quien la situación es especialmente dramática en la franja más al sur de la provincia, en las zonas del Bajo Cinca y de Monegros, donde, según ha afirmado, las cosechas ya se dan por perdidas.
La situación es agónica en la franja que afecta al resto de la comarca de los Monegros, con una cosecha agostada por el calor que se podría recuperar mínimamente de producirse lluvias de forma inmediata.
En la Hoya de Huesca, donde está la capital, la situación es de alerta extrema debido a que el calor ha propiciado una maduración anómala de la planta, mientras que la zona del Pirineo es la única de la provincia donde el cereal «no está muriéndose».
En total, ha explicado, la cosecha a recoger este año se prevé que sea de unas 582.000 toneladas, frente a las 1.030.000 del año pasado y las 690.000 del ejercicio anterior, con unas pérdidas económicas estimadas de entre 80 y 100 millones de euros.
La situación también es grave en la provincia de Zaragoza, aunque ha señalado que las 100.000 hectáreas cultivadas tienen un ciclo de maduración más largo al ser de trigo duro, lo que podría favorecer una recuperación parcial si cae lluvia en los próximos días.
También en Teruel, a excepción de Calamocha, existe preocupación respecto a la evolución de la cosecha, que se presenta retrasada, ha explicado Luna, debido a una situación climatológica «muy anómala».
El responsable de Asaja ha expresado su preocupación ante las previsiones que les han comunicado los meteorólogos, que no prevén que se originen cambios en el tiempo hasta mediados de mayo, una situación que, a su juicio, sería la «puntilla» para la producción de cereal en la Comunidad.
Asaja envío el pasado lunes un informe sobre la situación actual de la producción tanto a la Asociación Nacional de Cereales de España, a fin de determinar el impacto que tendría esta situación sobre las exportaciones, como a la junta nacional de su organización.
El año pasado se recolectaron sobre 19 millones de toneladas de cereal a nivel nacional, de las que 2,3 correspondieron a Aragón, lo que supone entre un 12 y un 14 % del total.