En esta ocasión, los amigos de lo ajeno causaron destrozos de diversa consideración en un transformador y se apropiaron de alrededor de 60 metros de cable de cobre, según las primeras estimaciones del agricultor afectado.
La organización profesional agraria lamenta "la situación de inseguridad de los profesionales del campo, que se sienten amenazados y desprotegidos ante este tipo de hechos delictivos, que suponen graves pérdidas económicas y que hacen que la seguridad de sus explotaciones figure en la lista de problemas que deben afrontar, junto a la crisis de precios o al incremento de los costes de producción".
ASAJA de Ávila también anima a los agricultores y ganaderos a alertar a la Guardia Civil ante movimientos sospechosos, así como que denuncien ante la Guardia Civil cualquier tipo de hurto que sufran.
(Foto: Archivo)