ASAJA Alicante.- El cultivo de la higuera, que está protagonizando un paulatino abandono a lo largo de la última década por la falta de rentabilidad que padecen los productores, está a punto de recibir un nuevo golpe esta vez perpetrado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que ha mostrado su falta de implicación al no querer autorizar el uso de Cinamida de Hidrógeno (Dormex).
ASAJA Alicante – Jóvenes Agricultores, junto al Ayuntamiento de Albatera, cooperativas, exportadores iniciaron hace dos meses los trámites necesarios para lograr una autorización excepcional del uso de productos bajo las mismas circunstancias y en las mismas condiciones que la autorización obtenida en Portugal.
La Conselleria de Agricultura emitió un informe técnico favorable del producto, que se emplea desde hace dos años en otros países vecinos como Portugal, país en el que sí conceden la autorización excepcional. Sin embargo, el Ministerio ha sorprendido a todo el mundo con evasivas, respuestas difusas y contestaciones verbales negando el permiso.
“Lo que necesitamos son políticos capaces de aportar soluciones a los problemas que sufre la gente, no que tiendan a perjudicarles. El Ministerio debe saber que este producto de cuaje evita que el fruto caiga al suelo cuando hay nieblas y otras inclemencias del tiempo similares”, explica el presidente de ASAJA Alicante, Eladio Aniorte, que concreta que este producto “no tiene ningún otro sustituto y es de vital importancia para conseguir el desarrollo adecuado de la higuera, que no se solape la producción y disponer del producto de manera escalonada para favorecer su comercialización”.
Por todos estos motivos, los agricultores consideran que la autorización excepcional es absolutamente necesaria para el futuro económico del sector. De hecho, están comunicando al Ministerio por escrito que de no conseguirla, tendrán que arrancar variedades por falta de rentabilidad, con las consiguientes pérdidas económicas y de jornales que ello conllevaría para los trabajadores de la comarca.
Otros de los prejuicios que sufren los agricultores al no poder utilizar Dormex y que están concretando en las cartas que están remitiendo a la administración son, por ejemplo, el retraso en maduración, concentración excesiva de la producción y el colapso del mercado en muy pocos días, con las consiguientes pérdidas económicas ocasionadas, que puede conducir a la total falta de rentabilidad del sector.
Los estudios realizados sobre su incidencia en el Medio Ambiente, sobre aves y lixiviación a las aguas subterráneas han demostrado no constituir ningún riesgo. ASAJA Alicante – Jóvenes Agricultores ha preparado los planes de uso de este producto con cuadrillas de 4 o 5 trabajadores que serían los responsables de suministrar el producto en toda la comarca para garantizar así que sólo se utilicen las cantidades de producto necesarias y que no se sobrepasen nunca los límites recomendados. “Al prohibirlo, creemos que la inspección no podrá estar debajo de cada higuera por lo que aumenta el peligro de no emplearlo con control”, lamenta el presidente de ASAJA Alicante.
“En la Unión Europea las normas sobre el uso de productos es muy estricta, lo que además apoyamos para garantizar que la calidad de nuestros alimentos es la mejor del mundo, muy por encima de la conseguida en Terceros Países. Sin embargo, estas reglas deben ser iguales para todos para no incurrir en casos de dumping y que obstaculicen el trabajo de los agricultores”, explica Eladio Aniorte.