La organización agraria UPA arranca este nuevo «curso agrario» pendiente del cierre de la negociación interna de la Política Agrícola Común (PAC) para el periodo 2023-2027, especialmente del acuerdo en torno a los ecoesquemas, y de la aprobación de la reforma de la Ley de la Cadena para “hacerla cumplir”.
Así lo ha asegurado en una entrevista con Efeagro el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, quien espera que la aprobación definitiva de dicha la Ley de la cadena alimentaria en el Parlamento sirva para asegurar la rentabilidad de las producciones agrícolas y ganaderas.
En ese sentido, le ha pedido a la “gran distribución” que “se meta en la cabeza” que “no puede seguir jugando con productos de primera necesidad poniéndolos como reclamo” en los lineales.
Para Ramos es esencial contar ya con la nueva Ley y “nosotros nos encargamos de que la cumplan los que no quieren”.
“LAS AYUDAS REDISTRIBUTIVAS DEBEN IR A PARAR A LA AGRICULTURA FAMILIAR Y A LOS PRODUCTORES “MÁS PROFESIONALES”
Además, valora el hecho de que la nueva norma permita hacer públicas las sanciones a los incumplidores porque cree que será disuasorio.
La falta de rentabilidad, incrementada en los últimos meses por el encarecimiento de las materias primas, es precisamente lo que ha llevado al sector lácteo a movilizarse recientemente.
Ramos no descarta que estas protestas se extiendan a otros sectores en las próximas fechas para reclamar también negocios más rentables.
Respecto a la próxima PAC, que marcará el curso agrario, UPA está especialmente pendiente de las últimas negociaciones para cerrar el modelo de aplicación de los ecoesquemas,en España, una de las grandes novedades de la nueva programación.
Espera que lo acordado “no suponga ningún trauma” para los productores y hace un llamamiento a la Administración para que “sepa entender y tenga en cuenta” que el sector lleva “años” adaptando sus formas de producir a prácticas más sostenibles.
Para Ramos, es importante además que las ayudas redistributivas vayan a parar a la agricultura familiar y a los productores “más profesionales”.
Otro tema importante del nuevo curso agrario en los próximos meses será la protección sobre el lobo ibérico, más aún después de que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico haya asegurado que confía en que la inclusión de la especie en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre) se concrete para el 25 de septiembre.
Eso supondría la prohibición de cazarlo en España y de ahí la confrontación con los ganaderos que se quejan de los daños que ocasiona con sus ataques a los animales de producción.
En ese sentido, Ramos ha pedido a la ministra Teresa Ribera que “cumpla los compromisos que adquirió” con el sector, que pasaban “primero por hacer un plan de gestión” del lobo y luego “se vería si se incluía o no en el listado”.
Al secretario general de UPA, le da la “sensación” de que el Ministerio “se confunde en la estrategia” con este asunto del lobo.
Por su parte, las organizaciones agrarias “vamos a continuar en nuestra unidad de acción”.
PIDE MEDIDAS URGENTES PORQUE “SI NO LLUEVE ESTE INVIERNO, PUEDE HABER RESTRICCIONES PARA EL RIEGO”
También UPA estará atenta a la aplicación de la norma de calidad del aceite de oliva -aprobada recientemente- porque aunque, “se podría haber ido a más”, los cambios introducidos son “positivos”.
En concreto, echa en falta una distinción “mucho más clara y certera de qué es el olivar tradicional”.
Según Ramos, es un sector que lo “ha pasado mal en los últimos años” pero “esperamos que ahora vaya a mejor”.
Los próximos meses serán decisivos además para determinar si se agrava la situación de falta de agua en muchas zonas de España.
Ramos ya habla de “falta importante de reservas en los pantanos” y en zonas como la cuenca del Guadiana y del Guadalquivir “empieza a ser alarmante” por lo que, “si no llueve este invierno, puede haber restricciones para el riego”.
Finalmente, en este repaso hace mención a la situación generada por la pandemia de la covid-19 porque confía en que el avance de la vacunación permita retomar la normalidad y que “nunca más vuelvan las restricciones” a la restauración.
Con ello, espera que las producciones de alimentos que se vieron más afectadas por el cierre del canal Horeca “empiecen a respirar y a funcionar de forma normal”.
(Texto: Juan Javier Ríos / Efeagro)