La reunión de este lunes va más allá de ser un mero trámite. Aunque la PAC ya se ha aprobado en la misma Conferencia Sectorial y no va a haber cambios sobre el documento ratificado por todas las CCAA salvo Andalucía, si quiere aprovechar por parte del ministro y su equipo y de las organizaciones agrarias para intentar cerrar algunos ‘flecos’ en el reparto de las ayudas acopladas que no han acabado de contentar a las OPAs.
Sobre la mesa habrá, entre otras, cuestiones como la ayuda al olivar de pendiente o al trigo duro pero también sobre el reparto de las ayudas por hectárea, algo que no acaba de convencer a todo el sector, máxime cuando el próximo día 17 será cuando se abra el plazo oficial para solicitar estas ayudas, momento a partir del cual se va a poder ver cómo queda definitivamente el reparto.
Enfrentamiento en el Congreso
Es segundo escollo duro que deberá afrontar el ministro es el miércoles y por partida doble. Primero deberá responder a tres preguntas orales en el pleno del Congreso y por la tarde comparecerá a petición propia en la comisión de Agricultura del Congreso, donde se referirá en su próxima intervención parlamentaria a los requisitos ligados a la figura del ‘agricultor activo’, a la actividad agraria, el nuevo modelo de regionalización del régimen del pago básico, el nuevo esquema de ayudas acopladas y el reparto de fondos de Desarrollo Rural procedente de los fondos comunitarios y de la Administración central. Asimismo, explicará el último acuerdo de pesca UE-Marruecos.
En ambos encuentros, el ministro va a tener dos cuestiones complicadas encima de la mesa. Por un lado, que mayoritariamente todas las formaciones políticas están en contra del reparto de la PAC, bien porque no favorecen a determinadas comunidades, bien porque están en contra de la filosofía del reparto, en especial sobre la figura del agricultor activo.
Pero sobre todo se espera que esta comparecencia se convierta en un intento de ‘iniciar’ la campaña electoral de cara a las europeas, en previsión de que finalmente sea el propio Miguel Arias Cañete quien encabece las listas del PP, una oportunidad que los partidos de la oposición no van a dejar pasar para intentar desgastar la imagen no sólo de un posible rival, sino del ministro mejor valorado de todo el Gobierno.