"Para el productor de carne hay un fuerte aumento en el precio de los insumos en el país que le quita rentabilidad al sector, a lo que se añade una continua traba a las exportaciones", dijo hoy a Efe Ernesto Ambrosetti, economista en jefe de la Sociedad Rural Argentina.
El experto señaló que estos dos factores son los principales motivos por los que Argentina pasó tan rápidamente del tercer al onceavo lugar de exportaciones de carne a nivel mundial.
Ambrosetti resaltó que a excepción de 2002, cuando hubo un brote de fiebre aftosa y Argentina cerró sus exportaciones, en 2012 el país exportó una cantidad similar de carne a la de hace 40 años, un "retroceso muy significativo", destacó el experto.
También mostró su preocupación por que el Gobierno argentino "no ha dado señales de cambiar su política para el desarrollo del sector".
Según un reciente informe de la Cámara de Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra), el panorama para el sector sigue siendo desalentador porque "el atraso cambiario y las retenciones han hecho caer las exportaciones a niveles históricamente decepcionantes".
El documento también insiste en que debido a este fenómeno, las empresas, "preparadas para abastecer los más exigentes mercados mundiales", se ven obligadas a concentrar su actividad en el mercado interno y añade que esto ha provocado "el cierre de 130 establecimientos industriales y el despido de 15.600 trabajadores".