Pese a aprobarse la voluntariedad de la vacunación frente a la lengua azul, el Gobierno de Aragón mantiene la recomendación de la vacunación del ganado ovino y bovino como medida más eficaz para evitar su transmisión, al tiempo que el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación gestiona la obtención de existencias de vacunas contra el serotipo 3.
La directora general de Calidad y Seguridad Alimentaria, Aitziber Lanza, ha trasladado este lunes esta recomendación durante una reunión con representantes de las organizaciones profesionales agrarias.
En la reunión se ha analizado el reciente acuerdo del Comité RASVE (Red de Alertas Sanitarias Veterinarias), que determina la voluntariedad de la vacunación frente a los serotipos presentes en el país (1, 3, 4 y 8) y establece la ausencia de requisitos específicos para el movimiento de animales dentro de la península.
El acuerdo también facilita el movimiento internacional de ganado, permitiendo la entrada de bovinos y ovinos desde otros estados miembros de la Unión Europea (UE) sin condiciones relacionadas con la lengua azul, siempre que no circulen serotipos diferentes a los detectados en la península.
Para exportaciones desde España, se tendrán en cuenta los requisitos de los países receptores.
Estas decisiones, como se recoge en el acuerdo del RASVE que ha difundido el Ejecutivo autonómico, responden a circunstancias excepcionales, como la coexistencia de cuatro serotipos distintos, una mayor actividad vectorial por el clima y la dificultad logística de implementar la vacunación obligatoria en todo el territorio.
También se menciona la resistencia del sector vacuno, que considera innecesaria una vacunación obligatoria ante una enfermedad que no afecta clínicamente a esta especie.
La lengua azul, una enfermedad transmitida por mosquitos, no afecta al ser humano.
En ovinos, puede causar fiebre, heridas, cojeras y abortos, mientras que en bovinos, aunque asintomáticos en su mayoría, pueden presentarse salivación excesiva, conjuntivitis y cojera.