La denominación de berrendo corresponde a la mancha que entra en el color blanco de esta especie; las más usuales son las de berrendo en negro y berrendo en castaño o colorado.
Se trata de una vaca rústica y recia que muchas veces hacen de cabestros por su volumen, de apariencia tranquila y porte noble, que manifiestan rápidas reacciones, pero sin agresividad, y notable facilidad para la doma y el manejo complicado con el ganado bravo.
En la actualidad, existen en España unas 8.000 vacas madre, de las cuales, alrededor de un millar pastan en Extremadura, algo más de 400 en negro y unas 490 en colorao.
Hasta ahora, según ha explicado Sánchez-Ocaña, se tenían muy pocos datos sobre el rendimiento de esta raza en comparación con otras razas de aptitud cárnica que se crían en extensivo, como pueden ser la negra avileña, la morucha o la retinta.
"Gracias a los dos testajes realizados hemos podido comprobar que la ganancia media diaria o el índice de transformación de estos animales es perfectamente equiparable al resto de razas para carne", ha destacado el presidente.
Así, se ha comprobado que consumiendo una media de 6 kilos de pienso, cada animal produce entre 1,3 y 1,4 kilogramos de carne, rendimientos "casi parejos" al resto de razas.
Frente a estos criterios de igualdad, los ganaderos de berrendo tienen que enfrentarse a la falta de rentabilidad de este ganado con respecto al precio del resto y a la escasez de ejemplares para madre, lo que hace que este tipo de ganado sea prácticamente marginal dentro de las explotaciones.
No obstante, Sánchez-Ocaña ha mostrado su convencimiento de que el hecho de que poco a poco la gente vaya conociendo algo más de esta raza y de que la aportación de sus sementales pueda ser distribuida a nivel nacional por el Censyra "será un gran aliciente para los ganaderos extremeños de berrendo".