De este modo se continúa avanzando en el proceso de planificación hidrológica, impulsando la coordinación de todos los intereses territoriales y garantizando el cumplimiento de la Directiva Marco del Agua de cara a conseguir aprobar los planes de cuenca de las demarcaciones competencia del Estado (intercomunitarias) antes de que finalice este año.
El Plan Hidrológico es el elemento básico de gestión de una demarcación hidrográfica, y tiene como objetivos conseguir el buen estado de las aguas y la adecuada protección del dominio público hidráulico. Marca las pautas para atender las demandas de agua respetando el equilibrio y la armonización del desarrollo regional y sectorial.
Contenidos de los planes
Los Reales Decretos aprobados estructuran el ámbito territorial de cada Plan Hidrológico, definen las masas de agua, marcan los objetivos ambientales y los regímenes ecológicos así como las prioridades y la compatibilidad de usos y la asignación y reserva de recursos. También regulan la utilización del dominio público hidráulico, su protección y la calidad de las aguas, además de las estructuras organizativas de gestión, la recuperación de los costes y el fomento de la trasparencia y la concienciación ciudadana.
Entre otras medidas, el Plan del Cantábrico Oriental define un régimen de caudales ecológicos que contribuirán a mejorar el estado de las 138 masas de agua superficiales que define el plan: 117 de la categoría río, 3 de la categoría lago, 14 masas en aguas de transición y 4 costeras y, de las 28 masas de agua subterránea.
Establece, además un programa de medidas a ejecutar hasta 2015 por importe de 1.169 millones de euros, de ésta cantidad a finales de 2012 ya se habían ejecutado 350 millones.
Cerca del 50 por 100 del presupuesto se destinará a minimizar la contaminación localizada y casi un 40% a mejorar la atención a las demandas; el resto de la inversión prevista contempla una serie de medidas destinadas a la restauración hidromorfológica, a la mejora de la utilización de las aguas subterráneas, a la lucha contra la contaminación difusa y a la protección de las zonas protegidas.
Cantábrico Occidental
Al igual que en el caso anterior, el Plan del Cantábrico Occidental define un régimen de caudales ecológicos que contribuirán a mejorar el estado de las 293 masas de agua superficiales que define el plan: 250 de la categoría río, 7 de la categoría lago, 21 masas en aguas de transición y 15 costeras así como de las 20 masas de agua subterránea.
Contempla, también, un programa de medidas a ejecutar hasta 2015 por importe de 1.460 millones de euros, de los que a finales de 2012 ya se habían ejecutado 575 millones. Cerca del 55 por 100 del presupuesto se destinará a minimizar la contaminación localizada y casi un 40% a mejorar la atención a las demandas.
Tanto el Plan hidrológico de la parte española de la demarcación del Cantábrico Oriental como el Plan Hidrológico del Cantábrico Occidental han sido elaborados por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, coordinadamente con la Agencia Vasca del Agua, en el caso del Cantábrico Oriental, y han contado con el informe favorable del Consejo del Agua de la demarcación, integrado por representantes de las distintas administraciones, central, local y autonómica, usuarios, agentes sociales y ecologistas.