También la concentración es vital para la promoción porque, según ha destacado Luque, cooperativas pequeñas por separado no pueden aspirar, por ejemplo, a contratar a David Bisbal, Antonio Banderas o Karlos Arguiñano para la difusión de los productos que permitan ampliar cuotas de mercado y mejorar los ingresos de los agricultores.
Ha destacó que las ayudas para la integración en el sector primario deben consolidarse, porque "serían la manera más rentable de invertir el dinero público", y ha pedido que el discurso político de apoyo a este proceso "sea real", más allá de las palabras.
En este sentido, ha recordado la oportunidad para la concentración que supondrá la nueva ley de fomento de la integración cooperativas y otras entidades asociativas que ha impulsado el Gobierno, aunque ha pedido al Ejecutivo que, a la hora de decidir cuáles serán las entidades "prioritarias" para recibir ayudas, se priorice a "muy pocas" y las que sean "muy, muy grandes" con el objetivo de que sean capaces de "llevar productos españoles" a todo el mundo.
"No vayamos ahora a tener 200 cooperativas prioritarias" -figura que contempla la ley para recibir los apoyos públicos-, ha señalado el director general de Hojiblanca, quien ha abogado además por acabar con "personalismos y localismos" que frenan procesos de integración.
En este punto, ha defendió una mayor profesionalización de la gestión de las cooperativas, entidades que -en su opinión- no han sabido contratar a buenos profesionales en muchos casos y que, incluso, "han hecho peor" lo de despedir a personas no capacitadas.
Ha subrayado que sólo mediante la concentración o fusión para ganar dimensión y poder de negociación se puede luchar contra el creciente poder de la distribución -que apuesta por aplicar fuertes gravámenes a marcas de fabricante para potenciar las suyas o "blancas"- y grandes empresas que compran sus productos.
Ninguna española entre las cien primeras europeas
Ha recordado que al vender en el mundo, las cooperativas se encuentran con compradores como Wall-Mart, la primera compañía de distribución del mundo, con una facturación superior a los 450.000 millones de dólares en 2011, por ejemplo.
Entre las cien primeras cooperativas europeas, algunas de las cuales facturan más de 9.000 millones de euros, no hay ninguna española, según ha destacado Luque, quien ha recordado que "no podemos ir a vender aceite a China, Brasil o EEUU con 700 cooperativas españolas".
En Dinamarca, seis cooperativas suman 4.000 millones de euros, es decir, la facturación media de cada una asciende a 1.348 millones de euros, mientras que España no supera los 4 millones.
Arla Foods concentra el 65% de la leche sueca y el 90% de la danesa, añade Luque, quien ha animado a que la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) española debería "darse una vuelta" por el norte de Europa para ver esta realidad, en referencia a la estrategia del organismo contraria a ciertas operaciones en el ámbito alimentario.
La concentración de Arla le ha permito acceder a mercados como el español, donde ya vende lácteos por valor de 100 millones de euros, según subrayó el director general. Mientras tanto, en España hay unas 4.000 cooperativas agrarias y, aunque se han creado algunos grupos "son insuficientes", ha recalcado Luque, quien también ha reconocido fortalezas para España, como su liderazgo en sectores como el vino o aceite de oliva.
En el caso de Hojiblanca, ha resaltado la apuesta de la compañía por continuar con su proceso de integración, tras sumar actualmente a 97 aceiteras, 22 aceituneras, 120 cooperativas de suministros y 7 ganaderas y más de 55.000 agricultores.
El Grupo Hojiblanca logró una facturación de 554 millones de euros en 2012, de los que 437 fueron gracias al aceite de oliva, 67 a la aceituna y 31 millones a la ganadería, ámbito este último en el que auguró un crecimiento "muy importante en los próximos años".