En el actual entorno de dificultades, Pont ha animado a los empresarios y emprendedores a que arriesguen y a que actúen "sin miedo al fracaso", pese a que éste aún está mal considerado en España. "La continuidad de las especies depende de aquellas que saben adaptarse al cambio", ha recordado.
A pesar de las preguntas de algunos asistentes, el presidente de honor de Borges ha evitado pronunciarse sobre el debate soberanista abierto en Cataluña y la consulta sobre la independencia que algunas formaciones políticas, entre ellas CiU, pretenden llevar a cabo durante esta legislatura.
Pont ha recordado que los empresarios tienen sus propias convicciones personales, aunque han de mantenerse al margen del terreno político y "tener la virtud de adaptarse a las cambiantes circunstancias" por el bien de la empresa.
"El empresario tiene la necesidad de adaptarse. Un empresario que tome una decisión política en la empresa asume un riesgo porque las situaciones políticas son cambiantes", ha explicado.
Para Pont, pues, todo empresario ha de tener una idea clara de cuál es su negocio y se tiene que centrar en su actividad y en crear puestos de trabajo y valor añadido.
"Es una equivocación el empresario que adopta una postura política", ha incidido ante el centenar de asistentes que han acudido al encuentro.
Primer exportador de aceite de oliva envasado
Borges es el principal exportador español de aceite de oliva envasado y uno de los cinco principales operadores del mundo en almendras y nueces, aunque está presente también en otros negocios, como el de las palomitas, a través de la marca Popitas.
La compañía, que fue creada hace más de un siglo por los padres de Antoni Pont, Antonio Pont y Dolores Creus, exporta actualmente a más un centenar de países y cuenta con diez plantas de producción en todo el mundo, seis de ellas en España, y una plantilla de 900 empleados.
La expansión internacional de la compañía ha sido posible manteniéndose como un grupo de capital cien por cien familiar, aunque hace seis años Borges decidió recurrir a fichajes externos para profesionalizar su gestión.
Antoni Pont ha calificado de "valiente" esta decisión, que supuso dejar al margen de la línea ejecutiva del grupo a la tercera generación de la familia Pont, los nietos de los fundadores.
"Fue una decidida apuesta por la profesionalización", ha destacado Pont, que ha considerado que "lo importante de una empresa es el talento" y que "no siempre tienes la suerte de que tus hijos sean los más talentosos y los mejor preparados".
Pont ha comentado además que Borges apuesta por la "cantera", formando a jóvenes graduados para que inicien en la empresa su carrera ejecutiva, "para ver si tienen recorrido de futuro" en la multinacional.
"He de confesar que no hemos tenido mucha suerte con el fichaje de estrellas exteriores, por eso hemos apostado por la propia formación", ha remarcado.
Antoni Borges ha desvelado además dos de los consejos que le dio su padre hace años y que, en parte, explican el éxito de la compañía a lo largo de sus más de cien años de historia. "Mi padre siempre decía que hay que ser honrado, incluso por egoísmo. El otro buen consejo -ha dicho- es echar la siesta cada día".