La Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice) ha elaborado una hora de ruta con 60 medidas en defensa del sector cárnico en el contexto actual marcado por las inminentes elecciones generales y por la Presidencia española de turno del Consejo de la Unión Europea.
En este contexto, la industria cárnica española reunida en Anice, ha elaborado un documento en el que recopila 60 medidas, propuestas y reformas, agrupadas en once áreas temáticas y dos ámbitos territoriales, el nacional y el europeo que, de llevarse a cabo, significarían un importante impulso para el desarrollo económico de uno de los más importantes sectores industriales de nuestro país y estandarte de la Marca España.
Entre las medidas propuestas destacan:
- La petición de protección para el sector cárnico-ganadero, siendo necesario su reconocimiento como sector estratégico para la economía española, para poder seguir liderando la producción, la innovación, la exportación y el empleo en España.
- Articular medidas para, la defensa del papel de la ganadería y de la industria cárnica en la lucha contra la despoblación, poniendo en valor las iniciativas empresariales ubicadas en las zonas rurales, que mejoren la reputación del trabajo en la cadena ganadero-cárnica.
- Aplicar fórmulas de respiro regulatorio al sector, elaborando un informe sobre la situación actual de cargas burocráticas y duplicidades que afrontan las pymes e impulsar un plan de eliminación progresiva de las mismas.
- Impulsar medidas relacionadas con la fiscalidad, como la rebaja del IVA para la carne, considerándola producto esencial dentro de la dieta mediterránea.
- En la misma línea, pero en el ámbito de la energía, se hace urgente articular medidas de apoyo y/o deducciones fiscales para una transición energética hacia modelos sostenibles.
- En relación con los mercados exteriores, se solicita unificar las competencias de Sanidad Exterior en el Ministerio de Agricultura, en lo que se refiere a la exportación a países terceros y refuerzo técnico de las estructuras administrativas competentes (personal y medios), bien en el seno del mismo ministerio o, a través de una nueva agencia creada a tal efecto.
- En término de financiación e impulso de la competitividad, se requiere potenciar un equilibrio de la cadena alimentaria que beneficie y proteja a todos los eslabones.
- Así mismo y a fin de situar a nuestro sector en la misma posición que nuestros competidores, se solicita inyección presupuestaria para el impulso de la innovación y la investigación, para financiar proyectos de investigación dirigidos a promover la innovación en retos sectoriales como la Seguridad Alimentaria, la Economía Circular, la Valorización de los residuos, el uso eficiente del agua, entre otros.
- La Asociación solicita también el desarrollo de una estrategia específica de transformación digital en el sector cárnico y en el conjunto de la cadena, para incentivar las industrias cárnicas 4.0, mediante la sensórica, la comunicación y el uso de la inteligencia artificial.
- Formar y educar es otra de las peticiones que se trasladan desde ANICE, que pasaría por diseñar estrategias nutricionales para los comedores escolares, fomentando en paralelo el conocimiento del ecosistema ganadero-cárnico en los libros de texto.
- Y por último, la Asociación solicita al nuevo gobierno el apoyo e impulso de ayudas financieras para la transición a modelos de negocio ganadero-cárnico sostenibles.
paralelamente, a estas 60 medidas, la imagen y reputación de sector, es otro de los grandes ejes principales en los que se pide acción al futuro Gobierno de España. «El sector necesita recuperar credibilidad frente a todos los ataques liderados por lobbies y grupos anticarne interesados en denostar la carne y sus bondades, desde el sesgo y sin ningún fundamento científico», aseguran.
En definitiva, desde Anice se demanda «apoyo institucional y político que permita al sector avanzar con seguridad y en igualdad de oportunidades hacia un futuro ciertamente complicado, tanto a nivel nacional, como europeo, recordando lo que se juega en Bruselas».
Por ello, consideran que «las tareas del nuevo gobierno deberían blindar las bondades del sector ganadero-cárnico para evitar que perdamos no sólo la soberanía alimentaria, sino nuestra identidad alimentaria como sector y como país».