"Si Andalucía tiene el mismo tratamiento que una comunidad que significa el 0,1 % es que hay un problema", ha añadido Planas, quien cree que la actual gestión del agua debe mejorar "sin duda" en el grado de participación y consideración hacia las competencias de las comunidades autónomas.
Ha abogado por garantizar su participación real y "desvincular el agua de la confrontación política para evitar circunstancias como las vividas durante la gestión final del plan hidrológico del Guadalquivir".
Asimismo, ha criticado al PP tras su intervención que continúe creyendo "en una Andalucía gobernada desde la plaza de España" y ha asegurado que el voto en contra del plan no ha supuesto ninguna "maniobra sectaria".
Ha recordado que el Gobierno andaluz llevó a cabo "reiterados intentos" de mantener lo acordado antes de la aprobación por parte del Consejo Nacional del Agua, y que hasta dos días antes tuvieron siempre "la voluntad de llegar a un acuerdo haciendo concesiones", aunque finalmente "no fue posible porque una decisión política fue tomada en el sentido contrario".
La parlamentaria del Grupo Popular Carolina González Vigo, ha lamentado que se exija a otros "lo que no han sido capaces de resolver cuando tenían el poder", ya que cree que los consejeros de Medio Ambiente de la Junta "no supieron asumir su máxima responsabilidad sobre el Guadalquivir".
Ha recordado que en el 2009 la Junta tenía plenas competencias sobre el Guadalquivir en Andalucía y, con un Gobierno socialista en el Estado, "ambas administración incumplieron sus compromisos".
"Es un problema de la incompetencia del que era titular, que eran ustedes", ha achacado al PSOE la parlamentaria popular, quien ha denunciado que "han cambiado el discurso cada vez que han podido".
Ha criticado que la Junta haya basado su posición en "intereses partidistas" porque "se han quedado solos con los ecologistas" y ha asegurado que hoy el Guadalquivir "se gobierna para y por Andalucía y no por y para los socialistas" y además es "más andaluz que nunca".
Por su parte, el portavoz de IULV-CA, Manuel Baena, ha dicho que el plan que se ha aprobado es "una chapuza y un atentado contra Andalucía", y ha afirmado que supone una "amenaza" para la reserva natural de Doñana.
Asimismo, ha señalado que crea una "fractura" respecto a lo que plantea la directiva marco del agua de la Unión Europea y ha tachado de "llamativo" que se "obviaran las conclusiones que se habían consensuado" durante cinco años de discusión.