EFE.- En declaraciones a los periodistas, antes de participar en el VII Congreso de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de Córdoba, la consejera ha destacado la labor de la UPA como representantes de la agricultura familiar.

Víboras ha resaltado de esta organización su «trabajo constante», fundamental para visibilizar, defender y dinamizar a este colectivo, el más numeroso del campo andaluz.

Durante su intervención, se ha referido a la diversidad agraria de Córdoba, que se presenta como la segunda en producción de aceite y cuenta con destacadas producciones de vino, cítricos o cereales, además de una importante cabaña ganadera y el liderazgo en la producción láctea andaluza.

Víboras ha explicado que gracias a esta diversificación, la renta agraria de la provincia creció un 6,5 por ciento en 2013, «un crecimiento notable frente al apenas 0,2 por ciento a nivel andaluz».

En su intervención, Víboras ha hecho hincapié en que Andalucía está siendo la «gran perjudicada» en la aplicación de la reforma de la PAC que ha diseñado el Ministerio de Agricultura.

Ha asegurado que, en total, la comunidad autónoma andaluza contará con 548 millones de euros menos que en el período 2007-2013, una cantidad que «se deja de invertir en nuestro medio rural para dárselo a otras comunidades autónomas».

En este sentido, ha calificado de «muy importante» la interlocución mantenida con las organizaciones profesionales agrarias y las cooperativas, gracias a la cual se ha acordado una posición común para defender los intereses del sector agrario en Andalucía.

Víboras ha recalcado que «es necesario contar con el máximo consenso para defender una posición común», de tal forma que el pasado miércoles se formalizó un acuerdo con las organizaciones profesionales agrarias de Andalucía (Asaja, Coag y UPA) y con la federación Cooperativas Agro-alimentarias (antigua Faeca) con el objetivo de salvaguardar los intereses del sector.

En el documento suscrito se pide al Ministerio la modificación del diseño de las ayudas asociadas y que el modelo de regionalización contemple 24 estratos, el número máximo acordado en la Conferencia Sectorial del pasado enero, así como que no se simplifiquen las comarcas.

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