"La seguridad y la calidad de los alimentos es un factor imprescindible para Ahorramas, por lo que no se tolera ninguna desviación al respecto de estos parámetros", señala el comunicado de Ahorramas, en el que también precisan que los límites de detección de la prueba de laboratorio son del 0,1%, por lo que puede deberse, según ellos, "a alguna contaminación cruzada de algunas materias primas". y aclaran que "en ningún caso es un problema de seguridad alimentaria".
El comunicado de Ahorramas responde al estudio de la OCU, publicado hoy, que ha detectado dos marcas de hamburguesas que contienen carne de caballo sin advertirlo en el etiquetado ("Eroski basic" y "Alipende" ambas marcas blancas de Eroski y Ahorramas, respectivamente), tras el análisis de una veintena de hamburguesas frescas envasadas.
La organización de consumidores aclara que "no se trata de un problema de seguridad alimentaria pero sí de un engaño", ya que el consumidor cree que compra carne de vacuno, por lo que pide una investigación a las autoridades competentes.
Por su parte, desde Eroski se ha explicado que la supuesta presencia de ADN de equino detectada en el análisis de la Organización de Consumidores y Usuarios "no significa que exista un porcentaje de carne de esa especie en el producto", ya que puede deberse a que la materia prima de vacuno haya estado "en contacto con equino durante el proceso de fabricación".
Eroski añade que los análisis de la OCU situaban a sus hamburguesas entre las cinco primeras con nota aceptable en calidad de carne, entre el total de 20 marcas estudiadas.
La empresa adjunta en su comunicado los certificados presentados por la dirección de la filial de Campofrío Carnes Selectas, así como por los proveedores de ésta, en los que confirman que los productos que suministran a la cadena son únicamente de vacuno.
Anice habla de falta de "rigor y parcialidad"
También ha entrado en la polémica la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice), que ha mostrado su rechazo al informe sobre hamburguesas de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) por "su falta de rigor, parcialidad y la intención de generar confusión y sensación de inseguridad en el consumidor".
En un comunicado, Anice ha precisado que la información publicada por la OCU contiene "afirmaciones subjetivas" como "calidad pobre", "mala", "aceptable", producto "poco apetecible", junto a "inexactitudes graves y mala fe" a la hora de establecer la valoración. Anice ha puesto como ejemplo las afirmaciones sobre los sulfitos, que "son un aditivo perfectamente regulado en su aplicación a los productos cárnicos y, por lo tanto, se emplean en las cantidades establecidas en la normativa".
Por ello, ha señalado que "al contrario de lo que se afirma en el informe, los sulfitos decoloran la carne y, por lo tanto, su utilización no tiene razones comerciales, sino que se emplean por responsabilidad, para garantizar la seguridad de los productos puestos a disposición del consumidor".
Por otro lado, Anice ha considerado que resulta "poco creíble" que en el análisis se presenten resultados divergentes para productos elaborados en las mismas instalaciones de producción, pero comercializados con la marca propia del fabricante y enseña blanca o del distribuidor. El sector ha reclamado "rigor" a la hora de difundir estas informaciones, que producen "un importante perjuicio social y económico" con consecuencias como la alarma injustificada, el desprestigio de la industria y de las asociaciones de consumidores "que hacen un trabajo serio y responsable".