Tras las acusaciones de la Unión de Extremadura de que Agroseguro podría haber falsificado las firmas de algunos de los partes de titulares de las pólizas tras las tormentas que arrasaron varios cultivos, y en especial al tomate en Extremadura , la compañía ha decidido efectuar las revisiones que procedan «si alguno de sus asegurados ha percibido algún tipo de irregularidad», aunque insiste en que «no existe indicio alguno de las imputaciones que recientemente se han vertido sobre la posible falsificación de firmas».
Durante los primeros días del pasado mes de julio se registraron intensas tormentas de pedrisco en la Comunidad Autónoma de Extremadura. Estas tormentas fueron especialmente virulentas los días 6 y 7 de julio, afectando significativamente a diversos cultivos y a una extensa superficie cercana a 10.000 hectáreas repartidas en más de 4.270 parcelas.
De entre las distintas producciones cultivadas en la zona y afectadas por el siniestro destaca el tomate, con más de 3.725 hectáreas, ubicadas en su mayoría en el término municipal de Don Benito. También se registraron siniestros en cultivos herbáceos (maíz y arroz), uva de vino y algunos frutales.
En la gestión del siniestro, Agroseguro asegura en una nota que «ha actuado, como hace siempre, de forma meticulosamente conforme con la normativa del Seguro Agrario Combinado. Así, la tasación de los daños se ha llevado a cabo por peritos técnicos independientes que han recogido toda la información de la tasación en los documentos denominados Hojas de Campo, cuyo contenido se ha firmado por el perito bien junto con el propio agricultor Asegurado o bien junto con el Tomador del Seguro, quien, para los supuestos de seguros agrarios suscritos en forma de seguros colectivos, representa al asegurado desde la contratación del seguro, de conformidad con el artículo 12 del Reglamento para aplicación de la Ley sobre Seguros Agrarios Combinados, aprobado por Real Decreto 2329/1979. Además, y como aspecto específico de este seguro, la Administración ejerce, a través del Consorcio de Compensación de Seguros, el control de las peritaciones».
cualquiera que tenga dudas sobre su parte puede ponerse en contacto con su Asociación tomadora del seguro o directamente con Agroseguro
En consecuencia, la compañía destaca que «no existe indicio alguno de las imputaciones que recientemente se han vertido sobre la posible falsificación de firmas del asegurado en ninguna de las actas de tasación».
Pero, a pesar de ello, y tal y como reclamaba la propia Unión de Extremadura, la compaía aseguradora asegura que «está comprometida sin ambigüedad alguna, como es su costumbre, a efectuar las revisiones que procedan si alguno de sus asegurados ha percibido algún tipo de irregularidad, a cuyo efecto éste puede ponerse en contacto con su Asociación tomadora del seguro o directamente con Agroseguro».
En el caso concreto de los daños en tomate en Extremadura, la empresa señala que una vez recibidas las declaraciones de siniestro, 14 peritos independientes iniciaron la tasación de los daños, para lo cual, conforme al contrato de seguro, contactaron directamente con el asegurado o el tomador del seguro al objeto de visitar las parcelas afectadas y cuantificar, en cada caso, el daño efectivamente producido por el siniestro.
Agroseguro aclara que en las parcelas en donde se advertía una mayor intensidad de los daños «se pudo reconocer de forma inmediata la inviabilidad de continuar con el cultivo; en otras parcelas donde la intensidad de los daños era inferior se creyó necesario inicialmente que se efectuaran sucesivas visitas periciales al campo».
Sin embargo, ante las graves pérdidas detectadas, «y como medida más beneficiosa, pues permite aplicar una mayor indemnización», en el seno de la Comisión Territorial de Seguros Agrarios de Extremadura se acordó, con el concurso de las Administraciones públicas y de todas las Organizaciones Agrarias que tienen representación en dicha Comisión, que quedara reconocida con carácter general la imposibilidad de continuar con el cultivo.
En total, sólo atendiendo al cultivo del tomate, la indemnización prevista para compensar los daños de los siniestros de esta campaña asciende aproximadamente a 15 millones de euros.