EFE.- Ahmed Uayach, presidente de la Confederación Marroquí de Agricultura y Desarrollo Rural (COMADER) dijo que "no es un problema comercial sino politizado", en una rueda de prensa organizada hoy en Casablanca por las principales asociaciones del sector y que contó con los auspicios del gobierno marroquí.
Yunes Zriken, vicepresidente de la Asociación Marroquí de Productores y Productores Exportadores de Frutas y Verduras (APEFEL), expresó su inquietud por el retraso en el proceso de ratificación del acuerdo ante el riesgo de perder otra temporada agrícola y volver al punto cero".
Para los operadores agrarios de Marruecos, algunos parlamentarios europeos, y particularmente españoles, usan el acuerdo agrario como carta para presionar a Marruecos sobre el contencioso del Sáhara Occidental.
Estos operadores pidieron al gobierno que actúe con firmeza ante esta situación y sugirieron algunas medidas de presión política: "El acuerdo de readmisión de emigrantes, el acuerdo de servicios o el de pesca son cartas con las que Marruecos puede jugar en este expediente", sentenció Yunes Zrikem.
Marruecos y la Unión Europea firmaron en los años noventa un acuerdo de asociación en materia de agricultura que fue modificado en 2003 y sigue vigente hasta hoy en día.
En 2006 comenzaron negociaciones entre Marruecos y la Unión Europea para firmar un nuevo protocolo que fue firmado el diciembre de 2010 con el Consejo de Ministros de la Unión Europea.
El protocolo queda pendiente de la ratificación del Parlamento Europeo y el marroquí.
El sector agrario europeo rechaza el acuerdo, que prevé una ampliación del calendario y los cupos de entrada de productos marroquíes, así como liberalización arancelaria en doble dirección, porque perjudica la producción europea.