La Asociación Empresarial de Fruta de Cataluña (Afrucat) ha pedido este viernes 6 al Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural que actúe para evitar el cierre de empresas frutícolas a causa de las elevadas pérdidas causadas por las heladas del mes de abril.
La presidenta y el director general de Afrucat, Montse Baró y Manel Simon, respectivamente, se han reunido con la consellera Teresa Jordà y han cuantificado en entre 20 y 30 millones de euros los costes fijos que las empresas frutícolas afrontarán esta campaña.
En este sentido, Simon ha lamentado que “hacía más de 40 años que no se vivía una helada tan devastadora como la de esta campaña y las pérdidas de producción serán históricas”.
De hecho, según los primeros datos recogidos por Afrucat y a la espera de analizar las previsiones de cosecha definitivas, entre el 70 y el 85% de toda la fruta de hueso catalana no se podrá recoger este verano, así como tampoco se podrá cosechar entre el 35 y el 40% de la pera, y entre el 15 y el 20% de la manzana.
Por ello, Baró ha destacado la “necesidad de apoyar a las centrales manipuladoras con base productiva para intentar que nadie se quede atrás y evitar así el riesgo del cierre de empresas”.
Afrucat han presentado a la consellera un modelo de ayuda a los costes fijos “no flexibles” de las centrales, que tendrían que materializarse en ajustes por fuerza mayor dirigidos a las centrales con base productiva.
por su parte, Jóvenes Agricultores y Ganaderos de Cataluña (JARC) ha pedido al departamento de Agricultura catalán que conceda ayudas por las afectaciones de las heladas de 6.000 €/hectárea (con un tope de 30 hectáreas) para los productores de fruta; 1.500 €/hectárea para la almendra de secano y 3.000 €/hectárea para la de regadío; y 250 €/hectárea para el cereal. Con estos importes se cubriría solo el 50% de los costes de producción, pero amortecerían el fuerte golpe de la reducción de la cosecha y permitirían mantener los trabajadores de las empresas que han sufrido daños.