Para la organización agraria, este es el primer paso que da la Unión Europea antes de liberalización de este sector, aunque resalta que "lo preocupante de este asunto es que si con restricciones de plantación ya producíamos excedentes, en el momento que se aumente la superficie por el aumento de la autorizaciones de plantación primero y por la liberalización después, traerá como lógica consecuencia el hundimiento más aún de los precios".
Por eso, la Unión de Extremadura va a intentar que en las normas que tendrá que regular el Ministerio de Agricultura a través del correspondiente Real Decreto, "se concedan las nuevas plantaciones exclusivamente a los profesionales del sector y que en este reparto de autorizaciones que supondrán como máximo un 1% de la superficie anual, no se queden nuestros productores como en repartos anteriores, donde siempre salíamos discriminados".