Según declaraciones del presidente de OPL, Manuel Iglesias, “no conocemos a ningún ganadero, de nuestra organización ni de fuera de ella, que haya cobrado más por su litro de leche este último mes de septiembre.
Por el contrario, resalta que los precios en origen han bajado, "lo que certifica que los datos del FEGA son totalmente falsos”. Iglesias ha añadido que “no se corresponden con la realidad de los ganaderos españoles, quienes no podemos hacer frente a las altas pérdidas de nuestras explotaciones”. Y es que los costes de producción se sitúan ya en una horquilla de entre 0,350-0,400 euros/litro, lo que deja a gran parte de nuestras ganaderías al borde del cierre.
Retención a cuenta por la supertasa
Esta situación empeora considerablemente si le sumamos que -"muy probablemente"- España tendrá que pagar una supertasa, que a partir del 30 de noviembre supondrá la aplicación a los ganaderos de una retención a cuenta de 2,7 céntimos por cada litro de leche que se sobrepase de las cantidades de referencia individuales asignadas.
Con todo, el presidente de OPL invita a los responsables del FEGA “a visitar las granjas españolas para que puedan comprobar que los datos que ofrecen no se corresponden con la realidad y solo reflejan los intereses de la industria”.
Por ello, la Organización reclama que al recopilar los datos sectoriales, “se contrasten los precios con los productores de leche, en aras de reflejar la realidad sectorial”. En este sentido, OPL recuerda su solicitudde entrada en la Interprofesional Láctea (INLAC), seno de decisiones en cuanto a política láctea y en el cual es “necesario que una organización luche por los intereses de los productores de leche”.