EFE.- En un comunicado remitido a los medios, la acusación particular ha asegurado que se están produciendo «retrasos injustificados» en este caso y admitiendo «diligencias irrelevantes» en el Juzgado de Instrucción número 2 de Cuenca, encargado del asunto.

La acusación ha afirmado que, desde julio de 2009, cuando se originó el fuego, han pasado por este juzgado «un total de siete» jueces diferentes, uno de los cuales dejó en libertad en enero de 2010 al único imputado por esta causa, Lorenzo Ruiz, detenido inicialmente como presunto autor del incendio.

En este sentido, ha recordado que el juez encargado del caso les dijo hace un año que la instrucción estaba terminada y se iba a proceder a celebrar el juicio, conforme a la Ley del Jurado.

Sin embargo, a fecha de hoy la instrucción sigue abierta y el próximo mes de abril llegará otro juez diferente para encargarse del caso, según ha adelantado la acusación particular, representada por Tomás Miguel Díaz Crespo.

Asimismo, ha opinado que el presunto incendiario fue puesto en libertad con «la oposición del Ministerio Fiscal», y desde entonces, los sucesivos jueces han admitido «sin verificación alguna sobre la necesidad, contenido y relevancia diferentes medios de prueba complementarios solicitados por la Defensa del acusado».

«De forma sucesiva va suplicando, en ocasiones diligencias reiterativas de las ya efectuadas, y en otras, diligencias y testificales irrelevantes para la determinación del tipo penal y la imputación, acompañado de continuos recursos ante la Audiencia Provincial», ha agregado la nota.

Para la acusación particular, esto persigue una «dilatación injustificada del procedimiento» y genera unos costes económicos y «de trabajo a los damnificados, incluida la Administración Pública, realmente injustos.»

En el incendio de Poyatos se quemaron 1.700 hectáreas de gran valor ecológico, 600 de ellas del Parque Natural de la Serranía de Cuenca.

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