El proyecto -entre construcción, operación y mantenimiento- está valorado en más de 200 millones de dólares, lo que supone unos 150 millones de euros al cambio actual. La ampliación aportará una capacidad de 137.000 m3 diarios adicionales -con los que la planta originaria llegará a 592.000 m3- y está previsto que preste servicio a una población de cerca de 600.000 personas. El plazo de ejecución previsto de la obra es de 28 meses.
Se trata del tercer gran contrato que obtiene ACCIONA Agua en Oriente Medio, que se ha convertido en una de las zonas del mundo con más potencial de crecimiento en el terreno de la desalación y depuración de agua ante su escasez generalizada.
La empresa, que cuenta con oficina en Dubai desde 2007, consiguió en octubre el diseño, construcción y puesta en marcha de la desaladora de agua de mar de Al Jubail, que prestará servicio a tanto a la ciudad como a su complejo industrial asociado situado en la Provincia Oriental sobre la costa saudí del Golfo Pérsico, un proyecto de unos 100 millones de dólares. Y hace unos días se hizo con el contrato para la operación y mantenimiento (O&M)) de las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) de Haddah-1 y Arana-1, situadas en la provincia de La Meca, con una capacidad conjunta de 375.000 m3 diarios.
Tras la paralización de proyectos sufrida en el Golfo Pérsico a causa de la crisis económica global en el periodo 2007-2011, a partir del pasado año se registró una reactivación de los grandes concursos de infraestructuras y agua en los países más desarrollados de la zona (Emiratos Árabes, Arabia Saudí, Qatar, Omán…). Recientemente, Emiratos anunció, por ejemplo, un plan de inversiones de 51.000 millones de dirhams (unos 10.500 millones de euros) en plantas de tratamiento de agua en los próximos cuatro años.
Además, en estos países se ha popularizado paulatinamente la tecnología de ósmosis inversa en detrimento de la desalación denominada MSF (Multistage Flash Desalination), basada en procesos de evaporación de agua, que hasta hace unos años era la más utilizada en Oriente Medio. La tecnología de ósmosis inversa consigue tratar con más eficacia y ahorro de costes energéticos el alto contenido de contaminación orgánica de las aguas existentes a causa de las elevadas temperaturas.
Acciona Agua tiene una destacada trayectoria en la aplicación de dicha tecnología en desalación de agua de mar y agua salobre, como lo demuestran las más de 70 referencias, cuya producción de agua potable es superior a 1,9 millones de m3/día y una población atendida de más de seis millones de personas.