La Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha ha abonado más de 30 millones de euros de ayudas en el primer semestre de 2020 a cerca de 8.000 beneficiarios de la línea de mantenimiento de agricultura y ganadería ecológica de la región, dentro del compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha con estos agricultores y ganaderos que iniciaron sus producciones ecológicas en el año 2015. Desde esta fecha, se han inyectado ya un total 180 millones de euros.
Castilla-La Mancha es la región europea que más dinero destina a la agricultura y ganadería ecológica, más de 250 millones de euros a través del Programa de Desarrollo Rural, y la que cuenta con más superficie y con más agricultores y ganaderos comprometidos.
Durante el 2020, el ritmo de ejecución de estas ayudas no se ha visto frenado a pesar de la crisis sanitaria e incluso se ha abonado un importe superior al pagado en años anteriores por estas mismas fechas, habiéndose adelantado el pago en cinco meses gracias a la buena labor de gestión realizada desde el Ejecutivo regional.
Estas ayudas están en línea con los objetivos fijados por la Unión Europea en la Estrategia Biodiversidad 2030, que pretende que se dedique a agricultura ecológica un 25% de la superficie agraria útil en 2030, y ante la cual Castilla-La Mancha se encuentra en buena posición de partida, dado que actualmente ya se cuenta con el 10 por ciento en este modelo productivo.
Cabe recordar que la Comisión Europea (CE) ha establecido varias excepciones en relación con los controles físicos de la producción de productos ecológicos debido a que la reducción de movilidad adoptada en los Estados miembro para frenar la pandemia de la covid-19.
El Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) publicaba en julio el Reglamento de Ejecución 2020/977 cuyas medidas serán aplicables hasta el próximo 30 de septiembre -algunas de ellas hasta el 31 de diciembre- y con carácter retroactivo desde el 1 de marzo.