ASAJA Asturias, al igual que está sucediendo en otras CCAA, ha denunciado que la nueva PAC conllevará un importante recorte en los fondos que van a recibir los ganaderos asturianos, respecto a la PAC anterior. El Ministerio de Agricultura publicó a través del Fega los importes unitarios provisionales para el pago del anticipo de los eco-regímenes, reduciendo el importe un 30% sobre lo previsto.

Según estos cálculos, el ecorregímen pastoreo, que es el más solicitado en nuestra región, pasaría de los 62,16 euros previstos por ha a 44,72 euros para las primeras 65 ha y 43,51 euros para el resto. Respecto al siguiente eco-régimen mas solicitado en Asturias, rotaciones en tierras de cultivo de secano húmedo, y que afecta al sector lácteo principalmente, pasaría de los 85,72 euros previstos por ha a 68,64 euros para las primeras 30 ha y 48,05 euros para el resto. Estos importes pueden ser revisados en abril de 2024, una vez determinada la superficie total definitiva, «pero mucho nos tememos que en ningún caso alcanzarán el importe previsto», lamentan.

Por eso, critican que «esta nueva PAC, que tanto el Ministerio como la Consejería nos intentaron vender como la PAC de la Cornisa, a pesar de las reticencias manifestadas por ASAJA Asturias que siempre mantuvo que era perjudicial para nuestra comunidad autónoma, ha resultado ser la peor posible para los ganaderos asturianos, pues a estos recortes previstos en el importe de los eco-regímenes tenemos que añadir la disminución del valor de los derechos y mucho nos tememos que el importe del pago redistributivo también va ser mucho menor del previsto».

«La nueva PAC es un despropósito que el Ministerio ha impuesto sin consenso, que no sólo conlleva recortes en las ayudas, sino que implica más burocracia y obligaciones, lo que ha provocado que incluso muchos ganaderos asturianos hayan renunciado a solicitar los eco-regímenes» lamentan.

Por último, advierten de que «estos recortes en los fondos de la PAC, unidos a los bajos precios percibidos por los ganaderos, los elevados costes de producción motivados por la subida de los insumos y la sequía llevan al sector ganadero de nuestra región a una crisis sin precedentes, que traerá más cierres de explotaciones si la Consejería no toma medidas al respecto».