Unión de Uniones, tras analizar los últimos datos del Observatorio Europeo valora positivamente el aumento del precio del 19% en el aceite de oliva virgen extra, de mejor calidad respecto al año pasado. Sin embargo, ha advertido de la posibilidad de que se pueda estar dando un posible fraude ante el comportamiento del mercado del aceite de oliva lampante en España, con un diferencial de precio de 0,17€/kg con respecto al de oliva virgen extra, algo que se separa de la realidad del mercado italiano cuyo precio es casi la mitad que el virgen extra.
Ante esta situación, la organización pide mayores controles «por si esta anómala situación se derivase de posibles mezclas que, aunque en volumen mínimo, puedan estar provocando que el precio del lampante responda a una demanda artificial del mercado».
Asimismo, sobre la subida del oliva virgen extra la organización destaca que las estadísticas muestran, al margen de las fluctuaciones características del sector, que el precio actual es similar al de hace 10 años.
Unión de Uniones reclama más medidas y medios de control para evitar prácticas objeto de sospecha por parte de la industria y distribución
En este sentido, la organización ha puesto de manifiesto cómo, desde 2012, la aceituna se ha caracterizado por un aumento sostenido del precio mientras que el aceite ha sufrido grandes sacudidas, pasando de estar en 2015 a 3,22€/kg a 2,07€/kg en 2016, lo que demuestra la gran volatilidad de los precios que ha existido en este producto, no siempre justificadas por la lógica del mercado.
De igual forma, la organización reclama más medidas y medios de control para evitar prácticas objeto de sospecha por parte de la industria y distribución «ya que esta última, continúa utilizando el aceite en sus lineales como un producto de reclamo, sin transmitir adecuadamente al consumidor el valor que tienen las diferentes calidades y la gran diferencia entre ellas».
Por ello, Unión de Uniones insiste en que falta en España cultura del aceite, pese a ser el primer país productor: «No decimos que haya que subir el precio al consumidor, es que es ilegal vender el aceite por debajo del precio de compra»,afirman desde Unión de Uniones. «La distribución prefiere ganar margen en el resto de productos de sus lineales y evitarse problemas en el aceite de oliva, contribuyendo, a una mayor confusión del consumidor», añaden.
Desde Unión de Uniones se apuesta por un esfuerzo común, de todo el sector (productores, almazaras y comercio) por dar a conocer al consumidor español las bondades del aceite de oliva virgen extra (AOVE) respecto al resto de categorías, por el elevado contenido en antioxidantes y otros componentes de elevada importancia nutricional.
En este sentido la organización se pregunta de qué están sirviendo los más de 7 millones de euros anuales que la Interprofesional del Aceite de Oliva Español recauda cada año del sector, la mitad de ellos de los productores. Unión de Uniones considera que dicha entidad «no está cumpliendo eficazmente su papel de dar conocer al consumidor las características de los diferentes tipos de aceite de oliva, para que este pueda valorar sus distintas calidades y hacer un consumo informado».