La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama), Isabel García Tejerina, ha subrayado que la transición hacia una economía baja en carbono es «un camino de no retorno» y que su Departamento trabaja ya en una ley para ponerla en marcha en España.
Durante una conferencia sobre las conclusiones de la cumbre de Marrakech (COP22) -pronunciada este lunes 16 en una jornada sobre ese tema organizada por del Club Español de la Energía-, Isabel García Tejerina ha hablado de la necesidad de «proteger el clima» como un «bien común».
La ministra ha dicho que de la COP22 de Marrakech ha salido un programa de trabajo con 30 puntos principales y un calendario ambicioso para desarrollar las reglas que regirán el Acuerdo de París hasta 2018.
También ha apuntado que la cumbre de Marrakech ha logrado «mantener el pulso» de la movilización política «sin precedentes» que se vio en la anterior cumbre de París, demostrando que «la comunidad internacional está decidida a seguir adelante con la lucha climática», que es ya «un proceso irreversible».
Entre las acciones concretas de España en esa cumbre, la ministra ha destacado la firma de una declaración política, junto con Alemania, Marruecos, Francia y Portugal, sobre intercambio energético, para facilitar las interconexiones eléctricas entre Marruecos y Europa.
La ministra ha apuntado que el compromiso de España en esta materia se materializará en una Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que servirá de «marco» para la descarbonización en los diferentes sectores.
«Esta lucha es de todos, estamos a las puertas de un nuevo modelo», ha añadido.
Por su parte, la directora de la Oficina Española de Cambio Climático (OECC), Valvanera Ulargui, ha incidido en que esta ley tendrá objetivos de reducción de emisiones a largo plazo (a 2030 y a 2050) con la finalidad de ver si lo que se hace en el presente está en consonancia con lo que se pretende alcanzar en el futuro, y de que las inversiones necesarias se acometen de manera anticipada.
Ratificando el Acuerdo de París, España se ha comprometido a una reducción de emisiones en los llamados sectores difusos (agricultura, transporte, residuos, gases fluorados y sector residencial) de un 26 % en 2030 respecto a los niveles de 2005, y de un 43 % en el sector industrial regulado por el mercado de carbono europeo (ETS, por sus siglas en inglés) europeo.
Ulargui ha asegurado, además, que la futura Ley de Cambio Climático y Transición Energética se va a negociar mediante un proceso «abierto y participativo».