La producción mundial de vino de 2016 será una de las más bajas de los últimos 20 años, un escenario que plantea oportunidades para mejorar la competitividad y comercialización de productos españoles que, por otra parte, se han beneficiado de nuevas subidas de precios en origen durante los últimos días.
El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) muestra del 10 al 16 de octubre un destacado repunte de precios del 5,32% para el vino blanco, hasta 2,34 euros por hectogrado, y del 2,19% para el tinto, hasta 2,93 euros.
Por plazas, los primeros se pagan a 2,64 euros/hgdo en Albacete; 2,65 en Badajoz; 2,27 en Ciudad Real y Cuenca y 2,07 en Toledo.
Los tintos lo hacen a 3,06 en Albacete; 2,44 en Ciudad Real; 3,26 en Cuenca; 2,90 en Badajoz; 2,87 en Murcia; 3,15 en Toledo y 3,21 en Valencia, según la misma fuente.
Las previsiones de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OEMV) constatan que la producción global de vino -sin contar zumos, ni mostos- rondará los 259,4 millones de hectolitros, con una disminución del 5% con respecto a 2015. Se situará entre las tres más escasas producciones desde 2000.
Italia se consolidará como líder (48,8 millones de hectolitros), seguida por Francia (41,9 millones) y España (37,8 millones).
Sobre otros países, apunta 4,8 millones de hectolitros para Rumanía y 22,5 millones para EEUU; en América del Sur, 8,8 millones para Argentina; 10,1 millones para Chile y 1,4 millones para Brasil.
Por su parte, señala que las producciones de Australia (12,5 millones de hl) y Nueva Zelanda (3,1 millones) han ido «en aumento».
los agricultores manchegos valoran las subidas de precios pero a su juicio no son suficientes
Por su parte, los agricultores manchegos valoran las subidas de precios, esta campaña, de los precios de la uva, aunque a su juicio no son suficientes.
El responsable nacional de vino de COAG, Joaquín Vizcaíno, destaca que las cotizaciones han aumentado un 20-25%, hasta 25 céntimos de euro por kilo -cifras muy variables en función de calidades y variedades-, pero que los costes de producción son de 35-50 céntimos.
El sector agrícola recuerda que es necesario seguir trabajando en la comercialización de vinos con mayor valor añadido para que puedan subir también las retribuciones de la uva a los viticultores.
A nivel agronómico, Castilla-La Mancha, el principal viñedo español, encara la recta final de la recogida, si bien muchos operadores han terminado de hacerlo ya hace días o semanas.
En La Rioja, la vendimia evoluciona de una manera más pausada que otros años, gracias al buen estado sanitario de las uvas y a que los parámetros de maduración mantienen sin demasiadas variaciones «un notable equilibrio», según el Gobierno regional.
Un gran número de firmas españolas han anticipado que la de 2016 será una añada excepcional, como es el caso de Bodega Otazu, de Etxauri (Navarra), una compañía que tiene el reconocimiento de «Vino de Pago» por su calidad, la máxima categoría para un viñedo que le permite elaborar bajo su propia Denominación de Origen Protegida.
Otazu especifica que los mostos de blanco «son muy frescos y aromáticos», mientras las uvas de tinto presentan pieles «con mucho color, aromas y taninos redondos» y, por tanto, «si el tiempo nos acompaña de aquí a final de vendimia, «todo parece indicar que estaremos ante una de las mejores cosechas de la historia de Otazu».
Sobre las ventas, el Observatorio español del Mercado del Vino (OEMV) detalla que el producto nacional en el comercio mundial sólo creció el 0,2 % en volumen en el interanual a junio, pero repuntó el +5,4 % en valor, «gracias al excelente desarrollo de espumosos y envasados», mientras que el granel «fue el que peor evolucionó».