Eladio Aniorte Aparicio / Presidente de ASAJA Alicante – Jóvenes Agricultores
El pasado 23 de septiembre el Consejo de Ministros aprobó la prórroga del Real Decreto de la sequía que afecta a la Cuenca del Segura y a los regadíos del Trasvase Tajo-Segura. Este documento permitirá al Ministerio de Agricultura continuar aplicando medidas excepcionales para paliar los efectos de la sequía durante el próximo curso agrícola. De nuevo, un año más, y con este ya van tres, los agricultores del sureste español nos vemos sometidos a la condicionalidad e incertidumbre de disponer de agua para regar según vaya publicando el Boletín Oficial del Estado (BOE) la aprobación de trasvases excepcionales cada dos o tres meses. Las migajas, como siempre, para nosotros. Y así ha sido. Acaba de ser autorizado un nuevo trasvase de 60 hm3 para octubre, noviembre y diciembre al Tajo-Segura, de los que 12,5 hm3 mensuales serán para regadío, una medida absolutamente insuficiente y fuera de plazo. Llega tarde. Y es que, dado que el umbral ‘mínimo’ para seguir trasvasando está por encima de los 336 hm3 y, atendiendo al decreto de sequía y la delicada situación que estamos atravesando, el Ministerio debería haber contemplado 40 hm3 mensuales para regadío, que son las necesidades reales que tenemos para salvar la campaña.
¿Creen ustedes que las empresas agrarias, los agricultores, los jóvenes… podemos seguir apostando y manteniendo al sector primario en la provincia en estas condiciones? ¿Opinan que es de recibo que desde 2014 el productor tenga que estar sometido a esta tortura cada día más amenazante? ¿Es esta una situación propicia para el crecimiento de nuestras empresas, su expansión, la exportación de frutas y hortalizas mediterráneas y el relevo generacional? Rotundamente NO.
Señores políticos, nos encontramos ante uno de los mayores desafíos de nuestra economía. O dotamos a este oficio de sentido y esperanza, o el sector agroalimentario se muere. Y esta nueva prórroga del Decreto de sequía que habla de movilizar los recursos disponibles de las plantas desaladoras, de los pozos de sequía y de cesiones, les aseguro que no es la solución, sino un parche más a nuestra maltrechada agricultura que llega demasiado tarde. Serían ustedes unos kamikazes del agua si nos dejan entrar, una vez más, en un nuevo periodo de sequía sin haber aprobado un Plan Hidrológico Nacional que resuelva de sin cortapisas nuestro gravísimo déficit hídrico, y más, teniendo en cuenta que en España más de cien mil hectómetros cúbicos anuales que se van al mar.
Y es que, gobierno en funciones o desgobierno de este país, en los tiempos en los que estamos, no se puede realizar una planificación hidrológica sin tener en cuenta los datos climáticos. ¿Aún no saben que la sequía es una situación atmosférica habitual en esta zona? Parece que no, me lo confirman con este Decreto con el que, además, dan a entender: vamos a ver si aguantan un poco más con algunas migajas que saquemos de aquí y de allá. A día de hoy, no hay ningún político cualificado y valiente que se atreva a poner las cartas encima de la mesa y apueste por un Plan Hidrológico Nacional y catapulte definitivamente los parches y tiritas que nos van colocando año tras año para callar bocas y, sobre todo, para no perder un solo voto en tiempos de grave decepción política. ¿Cuándo van a perder el miedo escénico a hablar de trasvases de ríos con excedentes?
Y es que, no sé dónde meter la cabeza cuando veo como a los dos partidos políticos mayoritarios de mi país (PP y PSOE) se les llena la boca hablando de las bondades y los milagros de las desalinizadoras, pretendiendo que éstas procuren el suministro ordinario de agua para riego. Tanto el Ministerio de Agricultura, con la Señora García Tejerina, como la Generalitat Valenciana, con Elena Cebrián, ya sólo hablan de desalinización. Y es que, los intereses de poner las desaladoras en marcha son muchos, ya que, de no hacerlo, se perderán los 2.700 millones de euros de subvención de la UE. Pero no se dejen engañar, si regamos con agua desalinizada de forma continuada perderemos mucho más, ya que el alto índice de boro de esta agua arruinará nuestros cultivos. Como ya he reiterado en numerosas ocasiones, el agua desalinizada es un complemento, pero nunca será una alternativa.
Por otra parte, ni se produce agua desalada suficiente, ni es de calidad, ni podemos pagarla. El precio de base es de 1€ por m3, aunque ahora desde el Gobierno valenciano nos dicen que se va a subvencionar a 0,60 € el m3. El agua del trasvase la pagamos a 0,30 € el m3. ¿No se dan cuenta de que no podemos asumir el costo del agua desalada? Asimismo, ¿hasta cuándo nos van a subvencionar ustedes esta agua para que nos salga a 0,60€? ¡Ah, perdón!, que es otro parche para silenciarnos algunos meses más que, hablando en plata, pagaremos todos los españoles con nuestros impuestos.
No podemos seguir consintiendo esta tomadura de pelo de un desgobierno inoperante, incompetente y escurridizo. Desde ASAJA Alicante llevamos más de siete meses solicitando, a través de peticiones formales, una reunión de trabajo al President de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ante la ausencia continua y la falta de apoyo de nuestra Consellera, Elena Cebrián y el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro. Dada la gravedad que ha alcanzado este asunto, estimamos que debe ser el Jefe del Consell el que nos atienda y coja las riendas de este problema. Porque necesitamos certeza y no más complejidad.
Por el momento, seguimos sin respuestas, sin apoyos, y sin políticos con propuestas que permitan la interconexión de cuencas como cualquier otro país desarrollado de Europa.