La Junta de Extremadura podría «reorientar» alguno de sus planes de empleo para paliar las repercusiones que tendrán sobre el trabajo los daños que las tormentas han ocasionado en los cultivos de las Vegas Altas del Guadiana y La Serena, según adelantó el sábado el presidente regional, Guillermo Fernández Vara.
Más de 10.000 hectáreas de cultivos se han visto afectadas, según las primeras estimaciones de las organizaciones agrarias, especialmente de tomate, maíz y diversos frutales.
Fernández Vara informó en el programa «Agropopular» de la Cadena Cope que el lunes habrá nuevas reuniones para abordar el problema y que ya están trabajando sobre el terreno los técnicos de la Junta y la entidad Agroseguros.
Lo primero, a su juicio, es tener claro el «mapa» de los daños y, a partir de ahí, dar una «respuesta dialogada».
Por parte del Ejecutivo regional, además de reorientar algún plan de empleo, planteó seguir profundizando en el aseguramiento, de tanta importancia para afrontar circunstancias como estas.
Fernández Vara recordó la importancia que dio a este asunto en su discurso de investidura y abogó por buscar nuevas fórmulas para aquellos cultivos en el que el seguro no es «suficientemente rentable» para suscribirlo.
El presidente extremeño consideró que el Gobierno central debería aprobar el decreto de ayudas que hay para estos casos y rebajar el número de peonadas para el acceder al subsidio agrario. E