EFE.- "No queremos que la crisis española se exporte a Francia", subrayó a Efe el responsable del melocotón y la nectarina en la principal asociación profesional del sector, la FNPF, Laurent Ducurtil.
Los agricultores españoles "no pueden exportar su crisis a toda Europa", se quejó Ducurtil, que denunció que "la mercancía española llega sin precio a Francia" y pone por los suelos la remuneración que obtienen los productores franceses.
Para ilustrarlo, señaló que la semana pasada la cadena de distribución Lidl lanzó una oferta en Francia que suponía vender a 0,79 euros el kilo, cuando el coste de producción en las explotaciones francesas es de 1,2 euros el kilo.
El responsable de la Federación Nacional de Productores de Fruta (FNPF) consideró que el problema viene de que la mano de obra en el campo es mucho más barata en España que en Francia, pero también que en los últimos años se ha multiplicado en España la superficie plantada y la producción no tiene salida.
"Si hay que hacer algo, hay que hacerlo en España" puesto que "en Francia no estamos en sobreproducción", al contrario de lo que ocurre al sur de los Pirineos, comentó.
Ducurtil dijo que la producción francesa de melocotones y mectarinas se sitúa en unos 270.000-280.000 toneladas, un volumen que equiparó al que sale sólo de la provincia de Lérida, y puso el acento en que hace unos años en Francia se recogían unas 400.000 toneladas.
Su organización -integrada en el gran sindicato francés, el FNSEA- ha exigido al Gobierno francés más controles de las importaciones procedentes de España, en particular "la mercancía que va sin destino" y en general toda aquella que no debería salir al mercado por no cumplir las reglas de calibre o de calidad.
Según sus evaluaciones, eso supone "el 30-40 %" del melocotón y la nectarina que entra de España.
En respuesta a las demandas de sus productores, el Ejecutivo francés puso en marcha -a través de sus servicios antifraude- el pasado viernes una campaña de controles a los camiones, empezando por el departamento de los Pirineos Orientales, fronterizo con España, y primera puerta de entrada de la producción española.