EFE.- Dos niños franceses que tienen los síntomas de haber sido infectados con la bacteria "E.coli" están siendo objeto de estudios para confirmar si se trata de ese mal, lo que, en caso de confirmarse, elevaría a nueve el número de infectados en Francia, informó hoy el ministro de Sanidad, Xavier Bertrand.
El resultado de los análisis bactereológicos que se están practicando para ver si es de la misma procedencia que el resto de los infectados serán conocidos mañana, aseguró Bertrand en Lille, donde se han detectado todos los casos.
Los dos nuevos casos sospechosos también están en esa región del norte del país, fronteriza con Bélgica, y se trata de un joven adulto y de un niño de unos diez años, agregaron fuentes médicas.
El ministro indicó que extenderán la vigilancia al conjunto del territorio, porque los filetes de carne picada que se sospecha que están en el origen de la infección fueron distribuidos por todo el territorio.
Los siete casos confirmados se concentran en diversas localidades del norte del país y todos ellos corresponden a niños que ingirieron esa carne picada procedente de los supermercados Lidl, quien retiró esa mercancía de sus establecimiento.
Las autoridades francesas consideran que el brote surgido en Francia no está vinculado con el alemán.
El ministro indicó que el estado del más grave de los afectados, un niño de 4 años del departamento de Oise, se deterioró en la pasada noche, por lo que le tuvieron que aplicar una diálisis.
Todos los afectados consumieron esos filetes de carne picada o unas bolas de carne procedentes de la misma planta de tratamiento.
Posteriormente, sufrieron una gastrointeritis hemorrágica que se transformó en una severa anemia.
La carne procedía de Alemania y de Holanda, precisaron las autoridades.