Los técnicos valorarán el alcance de los daños ocasionados por el granizo, que habría afectado, según las primeras impresiones, a no más del 2 por ciento de la superficie amparada por la denominación, la mayoría viñas de garnacha, tempranillo y syrah.
Lo lamentable, ha indicado el presidente de la denominación, es que a finales de esta semana iba a comenzar la vendimia en algunas parcelas de blanco, syrah o merlot y que la semana próxima estaba previsto extenderla al resto de los viñedos.
La lluvia va a afectar a la maduración de la uva
El agua caída con las tormentas -hasta 50 litros en algunos puntos- obligará ahora a atrasar un poco la vendimia, ya que la uva absorberá la humedad acumulada en la tierra y afectará a la maduración, que se ha producido de forma muy lenta, lo que beneficia a la calidad del vino.
El presidente de la denominación ha pedido a los seguros que "se porten" a la hora de valorar los daños a fin de que los viticultores puedan percibir las indemnizaciones que les correspondan.
La denominación prevé para este año una cosecha de 30 millones de kilos, doce más que el año pasado, en el que la adversa meteorología redujo la producción a unos 18 millones de kilos.
(Foto: Archivo)