Monitores de televisión, neveras refrigeradas, productos del muestrario, y miles de folletos, son los objetos que cada expositor va disponiendo dentro de su stand, según las necesidades de los clientes a los que quieran llegar.
   
     Otros módulos se han instalado también en los Pabellones 3 y 4, que forman una unidad en la parte trasera del recinto. Durante el fin de semana, toda esta zona está siendo un hervidero en el que cuadrillas de trabajadores aparcan tractores, disponen la maquinaria pesada de exposición, instalan cables, montan carpas, componen pesebres y gallineros… 

     En la Zona A -la parte asfaltada entre los edificios principales del pabellón-, ya se han instalado las carpas que acogerán a las empresas, donde también se ubicarán otros servicios como una cafetería para visitantes y expositores. En la Zona B y otras áreas traseras se han colocado nuevos tractores, muestras de establos, cochiqueras y otras construcciones, espacios que acogerán animales vivos e incluso hay varios silos de almacenaje de pienso, todo ello dispuesto para su venta.
  
   También se están habilitando otros servicios para los expositores y el público en general, como una pantalla led de información y publicidad, megafonía, cámaras de vigilancia y seguridad, los salones de actos donde se celebrará el Simpósium Internacional de Porcinocultura, las oficinas de Gerencia y administración, el gabinete de comunicación o el mostrador principal de información.
  
     Electricistas, carpinteros, peones, tractoristas, administrativos, limpiadores, azafatas, vigilantes de seguridad… la actividad en el Recinto Ferial de Santa Quiteria, de Lorca, no se detendrá pese al fin de semana. Son cinco pabellones, además de las zonas intermedias de exposición A y B, tres salones de actos, y dos áreas de usos múltiples, en un total de 20.000 metros cuadrados. El objetivo: que los más de 400 expositores y las decenas de miles de personas que pasarán hasta el jueves por SEPOR lo encuentren todo a su gusto, en un evento que se ha consolidado como una cita obligada dentro del sector.

      Monitores de televisión, neveras refrigeradas, productos del muestrario, y miles de folletos, son los objetos que cada expositor va disponiendo dentro de su stand, según las necesidades de los clientes a los que quieran llegar.
   
     Otros módulos se han instalado también en los Pabellones 3 y 4, que forman una unidad en la parte trasera del recinto. Durante el fin de semana, toda esta zona está siendo un hervidero en el que cuadrillas de trabajadores aparcan tractores, disponen la maquinaria pesada de exposición, instalan cables, montan carpas, componen pesebres y gallineros… 

     En la Zona A -la parte asfaltada entre los edificios principales del pabellón-, ya se han instalado las carpas que acogerán a las empresas, donde también se ubicarán otros servicios como una cafetería para visitantes y expositores. En la Zona B y otras áreas traseras se han colocado nuevos tractores, muestras de establos, cochiqueras y otras construcciones, espacios que acogerán animales vivos e incluso hay varios silos de almacenaje de pienso, todo ello dispuesto para su venta.
  
   También se están habilitando otros servicios para los expositores y el público en general, como una pantalla led de información y publicidad, megafonía, cámaras de vigilancia y seguridad, los salones de actos donde se celebrará el Simpósium Internacional de Porcinocultura, las oficinas de Gerencia y administración, el gabinete de comunicación o el mostrador principal de información.
  
     Electricistas, carpinteros, peones, tractoristas, administrativos, limpiadores, azafatas, vigilantes de seguridad… la actividad en el Recinto Ferial de Santa Quiteria, de Lorca, no se detendrá pese al fin de semana. Son cinco pabellones, además de las zonas intermedias de exposición A y B, tres salones de actos, y dos áreas de usos múltiples, en un total de 20.000 metros cuadrados. El objetivo: que los más de 400 expositores y las decenas de miles de personas que pasarán hasta el jueves por SEPOR lo encuentren todo a su gusto, en un evento que se ha consolidado como una cita obligada dentro del sector.