EFE.- «Queremos pedir a la Comisión Europea (CE) que adopte medidas acorde con el informe de la Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (EFSA según sus siglas en inglés)», dijo la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, a su llegada a un Consejo de ministros europeos de Agricultura.
«Nos preocupa mucho que la mancha negra pudiera entrar y afectar a nuestros cítricos, por eso queremos que la CE adopte medidas acorde con el riesgo que la propia EFSA ha manifestado sobre esta enfermedad», señaló.
La ministra precisó que España quiere «que haya controles también cuando la enfermedad esté en estado latente», que «se profundice en cualquier posible llegada de la enfermedad» y que, en el caso de que haya más interceptaciones de las que se fije como umbral, «haya mecanismos de respuesta automática por parte de la CE».
La ministra explicó que la petición «significa un enorme control sobre las importaciones cuando se detecta la enfermedad y también cuando está en estado latente», mediante la evaluación de los frutos sanos «para ver que no queda ninguna posibilidad de que la enfermedad pueda entrar».
El punto se abordará hoy en el Consejo a petición de España, que ha presentado al resto de países de la Unión Europea (UE) un documento que alerta de que el posible asentamiento de la «mancha negra» en las plantaciones de la Unión «tendría graves consecuencias y afectaría de forma muy negativa a la rentabilidad de nuestras explotaciones».
El texto recuerda que durante la campaña de importación de 2013 tuvieron lugar 35 interceptaciones afectadas por la plaga, lo que provocó las protestas de España y otros países.
Recuerda asimismo que el pasado febrero la EFSA publicó un dictamen que subraya que el riesgo de que el patógeno entre en la UE a través de las importaciones «es real» y que la enfermedad «podría asentarse en las zonas productoras europeas».
Por ello, España reclama el «refuerzo de los sistemas de control tanto en salida como a la llegada, poniendo especial atención a la presencia de las formas latentes de la enfermedad» y el «establecimiento de un único nivel de garantías con independencia del destino de la fruta».
También cree que hay que fijar medidas «para el caso de que se compruebe el incumplimiento de las garantías ofrecidas por parte del país exportador», que «deberían poder llegar hasta el cierre cautelar de las importaciones».
España pide a la CE «que presente a la mayor brevedad una propuesta que pueda dar las garantías necesarias a nuestras producciones y minimice el riesgo de entrada de la enfermedad, así como que establezca las medidas cautelares necesarias en caso de incumplimiento por parte del país exportador».