EFE.- Con esta reducción, se esperan unos niveles de producción similares a los del «negativo» año pasado, con lo que se acumularían tres campañas de «malos resultados», según informó a Efe el vicepresidente de Apag Extremadura Asaja, Félix Corbacho.
«Hace 20 días se contaba con una buena campaña, pero estos fuertes calores de mayo se van a llevar muchos kilos, provocando una merma bastante importante», ha comentado.
Las lluvias del pasado invierno, y sobre todo las de abril, llevaron a unas previsiones de producción «muy buenas», pero la granación se está desarrollando de forma poco aceptable debido a las altas temperaturas.
«El periodo de la granación no puede permitirse temperaturas por encima de los 30 grados en la primera quincena de mayo, que suponen más de 10 grados en relación con lo habitual», ha advertido el vicepresidente de Apag Extremadura Asaja.
Este mes de mayo «catastrófico» para el cereal hace que el sector «no viva una campaña en condiciones» desde 2011, lo que lleva a los agricultores a afrontar unas pérdidas que son «muy difíciles» de mantener año tras año, según Corbacho.
Las siembras de después de las lluvias de abril dejaron mejores frutos que las producidas en seco en noviembre, pero éstas se han encontrado con una primavera muy calurosa en todas las zonas habituales del cereal extremeño.
Corbacho teme que estos calores también afecten al olivar, sobre todo a las aceitunas más pequeñas, aunque quedan «unos días por delante» para ver su repercusión en la producción.
Los cultivos leñosos, por su parte, tienen «más aguante» gracias a las lluvias del mes de abril, y habrá que ver también cómo evoluciona lo que queda de primavera para hablar de posibles reducciones en sus producciones.
En otras comunidades autónomas menos afectadas por las inclemencias meteorológicas durante las campañas de 2012 y 2013, también se prevén reducciones de producción en el cereal de invierno, según Corbacho.