EFE.- Una nota de la Consejería informa de que a través de este acuerdo, GMR inicia una línea de comercialización con la que se busca abrir nuevos canales donde se valore la calidad y diferenciación de este producto.
La finalidad es acceder a los molinos de gofio, y además a otros establecimientos como panaderías artesanales y hoteles, y también al sector turístico.
La Consejería añade que también se pretende promocionar el producto para que el consumidor lo reconozca y lo demande y todo ello, agrega, con el objetivo de recuperar el cultivo de cereales de variedades tradicionales de Canarias, motivar a la población rural, y recuperar tierras abandonadas que antiguamente se destinaban a estos cultivos.
Agrega que esta iniciativa sirva para apoyar un nuevo modelo de gestión del subsector del cereal que Acete ha iniciado en la zona norte de la isla de Tenerife con la campaña 2013, y que abarca la trilla, limpieza del grano y su ensacado, así como el empacado de la paja para alimentación animal.
La Consejería recuerda que el cultivo de trigo en Canarias, fue muy importante en el pasado, ya que era la forma de subsistencia de un gran número de familias.
De su grano se obtiene el gofio y la harina para la elaboración de pan integral y la paja se utiliza como alimento del ganado.
Según el último censo oficial de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno canario la producción de cereales, comprendiendo trigo, millo, cebada y otros, ascendió a 2.239.000 kilos en el Archipiélago, de los cuales 1.091.000. corresponden a la isla de Tenerife.
Añade que la comparación de estas cifras con los 4.283.000 kilos producidos en 1985 pone de manifiesto el declive de estos cultivos y el riesgo de pérdida de variedades tradicionales de Canarias, de ahí la importancia de esta acción.