Cada año se produce por esta actividad daños por erosión en sendas y terrenos forestales lo que ha llevado a organizar estos servicios conjuntos entre Agentes medioambientales y Policía Autonómica que pretenden evitar alteraciones en el hábitat de la fauna y en la riqueza cinegética y que, además, provoca quejas tanto de propietarios como senderistas.
(Foto: Archivo)