EFE.- Son los datos que se han extraído tras contrastar el actual flujo migratorio con respecto al de la pasada temporada en la reunión de trabajo donde se ha procedido a un primer análisis del inicio de las futuras campañas agrícolas -ajo, tomate, sandía y melón- en la que han estado presentes representantes de organizaciones sindicales y agrarias, Consejería de Empleo, Tesorería de la Seguridad Social, Inspección de Trabajo y Oficina de Extranjería.
A preguntas de los periodistas con motivo de la visita que hoy realizado a la sede del Servicio Regional del Instituto Geográfico Nacional en Castilla-La Mancha, en Toledo, Labrador ha explicado que «han aumentado las contrataciones en la última campaña, pasando en números redondos de 61.000 a 67.000 contratos, pero sin embargo hay una disminución de cerca de 2.000 de los trabajadores extranjeros».
«Si en la campaña de 2012 hubo en torno a 31.000 personas en esta hay unas 29.000», ha informado el delegado del Gobierno, quien ha precisado la novedad que supone en este ejercicio la conclusión de la moratoria para los permisos de los trabajadores de nacionalidad rumana, que el año pasado alcanzó las 8.500 personas.
Ahora, ha añadido, los ciudadanos rumanos «ya no necesitan permisos de trabajo para poder realizar actividades laborales» en el marco de la Unión Europea (UE).
En la reunión se han analizado, además de las previsiones para estas próximas campañas, de menor envergadura que las de la vendimia o la aceituna, las necesidades prioritarias y las actuaciones más inmediatas para facilitar los servicios y asentamientos con el fin de, ha reseñado, «agilizar el conseguir el número de identificación extranjera para realizar los contratos de forma inmediata».
«Son campañas muy específicas y puntuales, que tienen que hacerse en un momento determinado y la Administración lo que debe hacer, y en eso estamos empeñados, es facilitar todos los medios posibles para que se pueda seguir creando riqueza y empleo, ha zanjado.
Por otro lado, y sobre la licencia única de caza y pesca que hoy se firma con las comunidades autonómicas de Madrid, Extremadura y Castilla y León, Jesús Labrador ha entendido que «es muy importante» por el volumen de negocio que supone para la región y, también, porque «se agilizan y facilitan los desplazamientos».
«Hablamos de mercado único, de servicios conjuntos, porque no tiene sentido que pongamos límites donde lo que debemos acentuar es la colaboración y la prestación de servicios», ha comentado.