El objetivo es lograr una mayor venta de forma directa y el mejor precio para que los acreedores puedan recuperar un mayor importe de sus créditos, según Paris. Entre las existencias vendidas destacan vinos como Pedro Ximénez, olorosos, amontillados, fino o brandy. También se ha vendido la tonelería, que es muy apreciada en la industria de este sector.
Quedan por colocar unas "holandas", un brandy de alta graduación de unos 60 grados, que cuenta con un carácter muy especial, lo que hace más difícil su venta, según las mismas fuentes.
Entre los activos que quedan por vender, figuran tapones, botellas y etiquetas que podría comercializarse a empresas del sector.
Falta encontrar compradores para muchas piezas del mobiliario del hotel adjunto a la unidad productiva de Bodegas Valdivia y que gestionaba otra empresa del grupo de la familia Ruiz-Mateos, que también está en concurso, como es el caso de Villa del Duque.
Entre estos activos figuran camas, comedores, escritorios, salones o mobiliario de zona de paso y de recepción, que en caso de no lograr venderse en ninguno de los dos procedimientos posibles, venta directa o subasta, la administración concursal tiene planteado donarlo a diversas ONG’s.
Ninguna oferta por la unidad productiva
La administración concursal no ha recibido, de momento, ofertas por la unidad productiva que cumplan los requisitos exigidos, ya que presentaron por debajo de la valoración de 22 millones iniciales y, en la segunda fase, también inferior a los 10 millones requeridos.
La unidad productiva, además de contar con la nave de fabricación y maquinaria como el tren de embotellado, posee un hotel y otros edificaciones anexas.
El inmueble cuenta con dos hipotecas, la primera por Fortis Bank, por valor de 5 millones de euros, y la segunda de Promontoria Holding, por unos 6 millones de euros.
Debido a la venta de activos que formaban parte de la bodega, como los vinos y la tonelería, el precio, en el caso de presentarse una oferta, sería inferior a los 10 millones de euros, y tendría que realizarse ahora ante el Juzgado de lo mercantil y contar con la valoración por parte de la administración concursal.
Si no hay oferta por la unidad productiva, el inmueble, que cuenta con una tasación de unos 18 millones, se vendería en subasta pública, a un precio de salida del 50% del valor de tasación.
La administración concursal quiere ponerse en contacto con la Junta de Andalucía y con otros organismos públicos para ofrecerles uno de los activos de Villa del Duque, un espectáculo audiovisual enfocado a la promoción del sector del vino en toda esta comarca.