EFE.- En rueda de prensa esta mañana, el secretario regional de UPA-UCE, Ignacio Huertas, ha hecho públicas las alegaciones que la organización va a presentar al decreto sobre seguros agrarios que prepara el Gobierno autonómico.
En su opinión, se trata de un sistema de ayudas «ineficaz», en el que ni siquiera se ha gastado el total del presupuesto destinado. En concreto, se ha gastado 1.300.000 de los 2 millones de euros que se habían previsto para esta partida, ha señalado Huertas.
Ha destacado la «incertidumbre» de los agricultores y ganaderos a la hora de contratar el seguro, pues no saben qué apoyo van a tener de la Administración regional ni cuándo les van a pagar, algo que se ha traducido en el hecho de que «2013 haya sido el año con menor contratación de seguros agrarios en la región en los últimos cuatro.
Por sectores, en frutales en 2013 se han contratado 2.000 hectáreas menos (de 12.000 a 10.000) y 40 millones menos de capital asegurado (de 134 a 94 millones de kilogramos).
En los siniestros de 2013 en frutales se han pagado 17 millones de euros, en lugar de los 25 millones que corresponderían a un año normal, según explica la organización profesional en una nota.
En el seguro de explotaciones se han asegurado el 50% de los animales con respecto a 2012; y en sequía en pastos han descendido en 600 las pólizas contratadas y el capital asegurado ha pasado de 74 millones en 2012 a 57 millones en 2013.
Por tanto, ha advertido, en 2013 ha descendido el número de pólizas en Extremadura en 1.000 (de 28.000 a 27.000) y el capital asegurado se ha reducido en 113 millones de euros (de 873 millones a 760 millones).
La ayuda de ENESA ha pasado de 21 millones en 2012 a 13 millones de euros en 2013 (un 40% menos), se añade en el comunicado.
«Los agricultores y ganaderos extremeños han pagado más de 3 millones de euros en el coste de los seguros (de 21 millones a 24 millones). Teniendo menos pólizas, menor capital asegurado y menores coberturas», ha concluido.
Huertas ha destacado que los seguros agrarios son un instrumento de mantenimiento de la renta y de competitividad, por lo que hace un llamamiento al consejero de Agricultura «para que apueste de verdad por los seguros agrarios y deje las excusas del mal pagador».
Por su parte, Antonio Prieto, responsable de UPA-UCE de Seguros Agrarios, insiste en que «es necesario volver al anterior sistema ya que el agricultor no puede financiar sus propias ayudas».
Por ello, entre las alegaciones presentadas, Prieto hace hincapié en que las ayudas sean sobre el coste real del seguro, y ha añadido que los agricultores con pólizas pequeñas no tienen derecho a subvención, lo que dejaría fuera a sectores tan importantes como el olivar, el viñedo, los cereales, el arroz, la apicultura y el maíz.
Además, ha solicitado que se priorice a los jóvenes agricultores y a los ATP (Agricultores a Título Principal) y que se incremente el porcentaje de ayudas.
La organización profesional agraria rechaza igualmente que se fije el techo de ayudas en 30.000 euros por considerarlo demasiado elevado, y propone dejarlo en 15.000 euros por explotación.
Para concluir, Prieto señala que actualmente «hay unos 600 agricultores y ganaderos extremeños esperando a que sus reclamaciones sean atendidas, ya que cumplen los requisitos pero no han recibido la ayuda».
UPA-UCE reivindica también que se defina la figura del «asesor de seguros agrarios» a través de las organizaciones profesionales agrarias y que las pólizas realizadas por las OPAS tengan un porcentaje diferenciado para sus agricultores y ganaderos, como así viene recogido en la propia Ley de Acompañamiento de Presupuestos.