Ugalde ha asegurado que "si se les ocurre" alguna "demencialidad legal" para impedir la venta, como declarar la finca de dominio público, una propuesta de los ecologistas que hoy estudia la Junta Rectora del Parque Natural Los Alcornocales, "tomaremos la respuesta adecuada".
"Responderemos desde el punto de vista jurídico y a lo mejor incluso penal", ha insistido tras explicar que tampoco tiene "ni pies ni cabeza" ampliar los límites del Parque Natural para incluir bajo su protección las 1.344 hectáreas que están fuera de él.
El precio de 300 millones iniciales ya ha bajado
En estas tierras, ahora zona de "regadío, secano o incluso matorrales", el Gobierno había planteado un desarrollo turístico que albergara un hotel de lujo, dos campos de golf, uno de polo y un aeródromo, un plan de usos que ha sido archivado en su primer paso de tramitación en el Ayuntamiento de Castellar.
Por eso ahora la finca se vende "sin proyecto" y ha tenido una "pérdida de valor muy clara", por lo que ya no se prevé el precio de 300 millones de euros que se barajaba.
Ugalde ha vuelto a apelar a las palabras de Susana Díaz y ha recordado que dijo que uno de sus objetivos "era atraer inversión extranjera" a Andalucía, algo contra lo que, en su opinión, ahora actúa el Gobierno andaluz al intentar evitar este proyecto que es "un bombón encima de la mesa" y que "es imposible que no pueda interesar" porque "no afectará nada" al cuidado del espacio y sólo "traerá riqueza y empleo a la zona".
"Están ahuyentando a la gente", aunque Salma Hayek lo rechaza por otros motivos
"Al final está ahuyentando a gente que se lleva la sensación de que las reglas del juego aquí no están claras", ha apuntado tras recordar que hay "entre diez o doce" personas o entidades interesados en comprar La Almoraima, para la que se busca una gran fortuna que tenga intención de, además de adquirirla, levantar en ella "un proyecto potente".
Una de estas fortunas son la de la actriz mexicana Salma Hayek y su marido, el multimillonario francés François-Henri Pinault, quienes visitaron en helicóptero la finca, buscando un lugar virgen para emprender "un proyecto medioambiental", según Ugalde.
A la pareja les gustó mucho el espacio, aunque mostró su preocupación porque el cableado de la red eléctrica está a la vista o porque, desde las alturas, se divisaba el humo de la Bahía de Algeciras.
La gerente de La Almoraima ha revelado que la actitud de la Junta y del Ayuntamiento de Castellar de la Frontera ha cambiado, ya que, en su día, el anterior Gobierno andaluz y el entonces consejero Luis Planas conocieron el borrador del proyecto de desarrollo turístico y dieron su visto bueno para que se iniciara su tramitación.
En su opinión, entonces no se habló de privatización pero sería de "tontos" no haberse imaginado que el Estado no podía emprender este proyecto y "se podían haber imaginado" que se precisaba la inversión privada, ha apuntado tras criticar que la oposición a la venta se haya "ideologizado" sin motivos técnicos, con una oposición en la que "parece que todo vale y no es así".
Ugalde está "convencida" de que "una vez que no hayan podido paralizar la venta", cambiará la situación y se consentirá el desarrollo urbanístico en esta zona de la finca "si no han avanzado en opciones irreversibles" porque "es un gran proyecto que no altera nada porque todo esté fuera del parque natural".
"Los trenes solo pasan una vez", ha advertido tras recordar que cuando se expropió la finca se pudo pensar en convertirla en una finca del Estado con un régimen "parecido a Doñana" y "tener un centro más de gastos" y se optó por mantenerla como sociedad privada que engendrara beneficios para buscar su sostenibilidad.
(Foto; www.minube.com)