Así, entre los retos concretos que se plantea Serra para esta nueva etapa al frente de la interprofesional destaca, según señala Asunción Fernández de Castillejo en www.abc.es, la necesidad de "abaratar costes de producción, sin menoscabo de la calidad", para lo cual se considera primordial continuar avanzando en las técnicas de recolección mecanizada para las variedades manzanilla y gordal, que representan aproximadamente el 30% de la superficie de este cultivo.
Igualmente, desde Intereaceituna se instará al Ministerio de Agricultura a que articule los instrumentos necesarios, dentro de la Normativa Nacional y Comunitaria, para avanzar en la mejora del funcionamiento de la cadena de valor y corregir "los desequilibrios y abusos que se vienen produciendo actualmente".
La nueva PAC mantendrá las ayudas gracias al modelo de regionalización
Por lo que se refiere a la aplicación de la nueva PAC en 2015, en el seno de Interaceituna destacan, en primer lugar, el hecho de que "dentro del actual proceso de reforma de la política agraria común, el sector del olivar, con unas ayudas entorno a 900 millones de euros, va a mantener un nivel de apoyo similar gracias al modelo de regionalización consagrado en el Acuerdo entre el Ministerio de Agricultura y las Comunidades Autónomas». De esta manera, se han limitado bastante los trasvases a otros sectores.
En la parte positiva también destacan que se ha logrado en la negociación europea que la ayuda del reverdecimiento o ‘greening’ (pago verde), que supone un 30% de los pagos directos a los agricultores, la tenga asegurada el sector sin tener que realizar ninguna actividad adicional más.
En la parte negativa, desde Interaceituna se destaca que, en lo que se refiere a la posibilidad de una ayuda adicional específica (además de la que le corresponde dentro del pago base y el reverdecimiento), la Comisión Europea no aceptó la propuesta presentada por España y que demandaban los productores. Aún así, consideran que hay posibilidades de revertir este asunto en 2016, fecha en la que se hará una revisión de las ayudas acopladas, según se acordó en la conferencia sectorial entre Ministerio y Comunidades Autónomas del pasado mes de enero.
En este sentido, aseguran que "se seguirá intentando e insistiendo en una propuesta de modificación del Reglamento Comunitario para que se incluya a este sector". La fórmula por la que se apuesta para que este reto pueda ser posible es que la Comisión acepte sencillamente cambiar en el reglamento la denominación actual de «aceite de oliva» por la de «olivar», que englobaría a ambos subsectores.
No obstante, dada la urgente necesidad de buscar la viabilidad y rentabilidad de determinadas zonas y variedades, tan importantes por el empleo que genera este cultivo —8 millones de jornales al año, 20.000 explotaciones en Andalucía y casi 500 empresas de transformación y entamado de aceituna— y por el alto valor medioambiental del mismo, Interaceituna urgirá a la Junta de Andalucía a la puesta en marcha de un Plan de Reestructuración o Reconversión (que incluye marco, poda y variedad), el cual ya se venía demandando desde campañas anteriores y al que la Consejería de Agricultura se había comprometido a presentar hace ya tiempo.
esidad de identificar, de forma clara, las distintas variedades de aceitunas para educar al consumidor, suministrarle la mayor información y aportar trasparencias en las relaciones comerciales, en la Interprofesional se ha validado un método de análisis del ADN (genética de las distintas variedades que se comercializan), «lo que permitirá una identificación clara y certera de las mismas para evitar confusión al consumidor.».